Doña Elena reaparece en la misa por Kardam de Bulgaria
La Infanta arropó a la familia en el primer aniversario de la muerte del Príncipe Tírnovo
El 15 de agosto de 2008 la vida de Kardam de Bulgaria y Miriam de Ungría dio un giro trágico en el kilómetro 42 de la A-1 , a la altura del municipio madrileño de El Molar. El Príncipe de Tírnovo y su esposa regresaban en su Jaguar de su finca en Riaza (Segovia) cuando el coche se salió de la autovía, chocando con un árbol y volcando a pocos metros de la fachada de una vivienda. El primogénito del Rey Simeón II de Bulgaria sufrió las secuelas del terrible accidente durante siete años, hasta que el 7 de abril de 2015 su vida se apagó para siempre.
Ayer, en el primer aniversario del fallecimiento, se recordó su figura con una misa celebrada en la catedral ortodoxa de Madrid. Esta iglesia tiene un significado muy especial para la familia, ya que fue el propio Kardam quien colocó la primera piedra cuando se construyó en la década de los 70.
A la misa asistieron su viuda, Miriam de Ungría ; sus hermanos los Príncipes Kubrat y Konstantin de Bulgaria , y la esposa de éste, María García de la Rasilla, junto a sus dos hijos, Humberto y Sofía. La Infanta Doña Elena , a quien no se veía en público desde la pasada Semana Santa, no quiso faltar a la misa en memoria de Kardam. También estuvieron la duquesa viuda de Calabria, Ana de Francia , quien se fundió en un emotivo abrazo con Miriam a la llegada al templo; los marqueses de la Serna y el presidente de la Comunidad Judía, David Hatchwell.
Con el paso del tiempo, Miriam de Ungría, ha recuperado sus compromisos sociales y laborales. Hoy está volcada en su firma de joyas y hace unos meses confesaba a este diario que el trabajo se había convertido en «su válvula de escape».