Daddy Yankee: «Si fuera machista, mi matrimonio no hubiera durado»
El cantante puertorriqueño es el artista latino más escuchado en Spotify y su fama sigue creciendo
Aunque era ya mundialmente célebre gracias a «Despacito» -la canción que interpreta junto a Luis Fonsi -, Ramón Luis Ayala (40), conocido como Daddy Yankee, se ha posicionado como el artista latino número uno en Spotify y número doce a nivel mundial a principios de año.
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A pesar del éxito de sus temas, el cantante puertorriqueño trata de llevar una vida sencilla sin que la fama le influya demasiado: «No le presto demasiada atención, intento vivir de la manera más normal posible», explica durante una entrevista con ABC en el Hotel Intercontinental de Madrid, donde se hospeda durante su estancia en la capital. «Me encantaría por un día pasar desapercibido y hacer cosas que no puedo desde hace años, como ir al cine», reconoce.
Gira por España
El cantante visita nuestro país en medio de su gira «Tamo en vivo», que arrancará el domingo en el WiZink Center de Madrid con el primero de los conciertos que ofrecerá en nuestro país. Después vendrán Málaga, Barcelona, A Coruña y Valencia. «Lo que más me gusta de España es la gente, la energía que tiene. Es un país muy dinámico y apasionado , con diferentes idiosincrasias», confiesa.
Pese a la controversia del sexismo con la que tiene que lidiar la música urbana latina , Daddy Yankee no se considera una persona machista: «Si lo fuese mi matrimonio no hubiese durado ni un año». Casado desde hace más de dos décadas con Mireddys González (40), considera que su mujer es un apoyo fundamental en su vida, aunque aclara: «Con los años ha mermado la situación, pero al principio no sabíamos cómo llevarlo». La fama le ha reportado éxitos, pero también momentos duros: «Hubo un tiempo en el que estaba siempre fuera buscando pan para mi familia y ella se dedicaba al cuidado a los niños. Fueron años muy difíciles », recuerda, nostálgico. «Si dijese que compaginar la fama con la familia es fácil te mentiría, es complicadísimo ». A pesar de las dificultades a las que ha tenido que hacer frente, el cantante, conocedor de la soledad asociada al triunfo, siempre encuentra un hueco para relajarse con los suyos. «Cuando viajas tanto al final buscas una estación tranquila, yo la tengo en mi tierra con mi familia». Cada vez que la visita de nuevo, aprovecha para hacer turismo: «Me gusta descubrir cosas que desconozco del lugar donde nací».
El cantante, popular por canciones como «Gasolina», tiene tres hijos adolescentes: Yamilette (19), Jeremy (17) y Jesaelys (14). «Fui padre a los 17 años y es algo que no se lo recomiendo a nadie», afirma. «Me tuve que hacer hombre a la fuerza y no fue nada fácil». Fue una paternidad imprevista que le impidió continuar con sus sueños: «Quería estudiar e ir a la universidad, pero cuando sucede algo así tienes que cortar con toda tu vida anterior y empezar de cero». En aquellos momentos, entre sus planes no estaba dedicarse a la música . Durante el periodo de recuperación, tras sufrir una herida de bala, decidió concentrarse en su faceta como artista. «Hubo una pelea de bandas en la que, sin quererlo, me salpicó gravemente». La lesión casi le cuesta la amputación de una pierna: «En ese momento pensé que mi vida y mis planes de futuro se acababan», explica, pues en su adolescencia soñaba con convertirse en jugador de beisbol profesional. « La gente desconoce que soy cojo , y esto pasó de ser una limitación a convertirse en una fuerza para seguir adelante».
Considerado como uno de los fundadores del reggaeton, ya que en sus orígenes apenas existían cantantes que interpretasen este estilo musical, hoy tiene que lidiar con decenas de nuevos artistas que llegan pisando fuerte: «Me encanta la competencia. Soy de esas personas que si no tienen rivalidad se aburre, es algo que me motiva a seguir », asegura entre risas. «Me gusta ver cómo llega sangre nueva porque le dan vigencia a nuestro género », concluye.
