El concurso Miss Venezuela, cercado por delitos de corrupción

El certamen queda suspendido por los negocios ilícitos de sus organizadores, ligados al régimen de Maduro

EFE

Ludmila Vinogradoff

Venezuela siempre ha brillado por sus reinas de la belleza, una bandera de orgullo nacional. Exuberantes mujeres de larga melena y sonrisa perenne que viajan por todo el mundo como las mejores embajadoras del país. Ahora la imagen del certamen ha quedado empañada por la sospecha de corrupción y prostitución que se ciñen en torno al evento, llegando a salpicar a altos dirigentes chavistas. En vista del escándalo, el Grupo Cisneros, empresa organizadora de Miss Venezuela , ha tomado el toro por los cuernos y el miércoles anunció su cancelación. «Se ha tomado la decisión de iniciar una investigación interna para determinar si durante las gestiones de organización se ha incurrido en actividades que quebranten los valores y la ética del certamen» , reza el comunicado oficial.

Tras 40 años de eficiente exportación de reinas de la belleza, que le ha brindado al país más de una docena de coronas de Miss Universo y el Miss Mundo , el concurso agoniza. «La organización nunca ha consentido ni aceptará ningún acto que perjudique su reputación y la de sus participantes», añade el texto, en el que se anticipa que se hará una «reestructuración del certamen y se reforzará el código de ética».

La polémica estalló a principios de marzo cuando se publicó en las redes sociales imágenes de la ex miss Venezuela, Zoraya Villarreal , en un acto público junto a Miss Universo 2009, Stefania Fernández , y el empresario Diego Salazar . Este se encuentra detenido por un caso de corrupción y blanqueo de capital en la Banca Privada de Andorra, y vinculado a su primo Rafael Ramírez, antiguo zar de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y ex ministro de Petróleo, que tiene una orden de captura internacional por corrupción.

La imagen de Diego Salazar en compañía de las exmisses causó un gran revuelo en las redes por su provocación, dando lugar a un cruce de acusaciones de otras concursantes, mientras Venezuela se cae a pedazos por la ruina en que la han dejado los gobernantes chavistas-maduristas.

Favores sexuales

El escándalo de las misses ha involucrado a una docena de ganadoras del certamen, que han sacado al aire los trapos sucios de las más jóvenes, acusándolas de conceder favores sexuales para ser aupadas a los primeros lugares y convertirse en finalistas. Y los únicos que tienen dinero para financiar los enormes gastos de una reina de la belleza son los enchufados y altos cargos del régimen de Maduro. Muchas chicas usan el concurso como trampolín para asegurarse la oportunidad de su vida, como la de ser locutoras, animadoras en televisión o modelos de firmas prestigiosas.

La presentadora Annarella Bono ha salido en defensa de Zoraya Villareal. Insinuó en las redes que otras participantes estarían ligadas a la corrupción y los favores sexuales. «Todas son unas zorras y aquí todo el mundo las alaba. La arrechera (rabia) que me da es que las únicas enchufadas somos nosotras», dijo la exesposa del militar de alto rango, Antonio Morales. «Los venezolanos pueden estar seguros de que la organización no dudará en tomar medidas necesarias para asegurar que dentro y fuera no se cometan actos contrarios a las normas, valores y principios morales y éticos», firma Jonathan Blum, presidente de Cisneros Media.

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