Ágatha Ruiz de la Prada, sobre su ruptura con Luismi»: «Espero no verlo en mucho, mucho tiempo»
La diseñadora de moda rompe su silencio para hablar sobre la relación fallida con el empresario
Las segundas partes nunca fueron buenas. Eso mismo debe de pensar Ágatha Ruiz de la Prada (59 años) después de darle otra oportunidad a su relación con Luis Miguel Rodríguez , más conocido como Luismi. Con el dueño de Desguaces La Torre, la diseñadora recuperó la ilusión en el amor tras su divorcio con Pedro J. Ramírez. Sin embargo, la cosa no ha funcionado.
Las cosas entre ellos iban de maravilla hasta que aparecieron unas imágenes en la revista «Lecturas» de Luismi en actitud cariñosa con otra mujer , lo que llevó a Ruiz de la Prada a refugiarse en su casa de París. Después de mucho reflexionar sobre su relación, la diseñadora decidió darle una segunda oportunidad al que había sido su novio durante dos años. Pero no ha salido bien. Así lo ha confirmado la propio Ruiz en la revista «¡Hola!» este miércoles.
Ágatha Ruiz de la Prada ha desvelado los motivos de esa ruptura definitiva que sabía que llegaría en algún momento. «Desde el primer minuto sabía cómo iba a acabar», dice a la citada revista. No ha sido una decisión nada fácil para ella, pero asegura que Luismi le ha ayudado. «He tomado yo la decisión, pero Luismi, de una manera consciente o inconsciente, me ha empujado a tomarla», explica.
Y prosigue: «Luismi se dio cuenta de que no podía hacer esas cosas si estaba conmigo, pero está acostumbrado a salir y divertirse». Está convencida de que no le fue infiel, aunque sí hubo un engaño, como así asegura: «Tiene una agenda de mujeres terroríficas que se quieren aprovechar de él. Ha sido una tontería, pero no una infidelidad. Lo que no estaba dispuesta es a que se hiciera un par de Luismi cada semana». Aunque considere que es una ruptura definitiva, asegura que «va a ser muy difícil no picar».
Luismi le contó que la mujer, Marcia di Lele , a la que Ágatha Ruiz de la Prada llama varias veces en su entrevista «Di Lela», es una actriz. «Pero no me contó que era actriz porno », dice visiblemente molesta por el engaño y resentida con la mujer que llegó incluso a lucir un pañuelo suyo por televisión.
Pese a todo, Ágatha Ruiz de la Prada no tiene malas palabras para él: «No tenemos puntos en común. Mi vida es otra: me gusta leer, ir a museos, la cultura. Pero estoy muy agradecida. Todo ha sido muy divertido, ha sido un regalo del cielo. Viviría todo otra vez porque me lo he pasado bomba ». Eso no quiere decir que vayan a mantener una estrecha relación de amistad. La diseñadora de moda espera no ver al empresario más importante de desguaces de España en «mucho, mucho, mucho tiempo».