Carlota Casiraghi descubre el lado filosófico del Principado de Mónaco

La hija de la Princesa Carolina impulsa una cumbre de grandes pensadores en La Roca

Carlota Casiraghi descubre el lado filosófico del Principado de Mónaco ABC

juan pedro quiñonero

Carlota Casiraghi presentará hoy los primeros Encuentros Filosóficos de Mónaco, destinados a dar un barniz «cultural» a la imagen de «lujo y glamour» del principado gobernado por su tío, el Príncipe Alberto, que espera modernizar y ampliar La Roca construyendo una gran isla artificial en el Mediterráneo.

Si su madre, la Princesa Carolina, y su tía, la Princesa Estefanía, dieron al antiguo «glamour» de Grace Kelly un tono menos encopetado y más «casual», Carlota Casiraghi espera introducir nuevas facetas culturales en la marcha de los negocios públicos de Mónaco. Al destierro artístico y aristocrático de la historia de Mónaco, la joven Grimaldi espera aportar una nota mucho más libresca, que ella resume de este modo: «La filosofía, el estudio de la filosofía, tuvo gran importancia para mí cuando estudiaba bachillerato. Una importancia casi tan grande como el amor. Tras mucho dudarlo y consultarlo con mi madre y con mi tío, he decidido lanzar unos Encuentros filosóficos, anuales, que durarán seis meses. Para comenzar, los filósofos y profesores que forman parte del equipo fundacional decidieron que un buen tema de reflexión sería el amor».

Amor y filosofía

Dicho y hecho . Bajo la presidencia honoraria y ejecutiva de Carlota Casiraghi, la primera jornada de los Encuentros comienza hoy con este tema de trabajo: «El primer encuentro amoroso». Cynthia Fleury y Nicolas Grimaldi lanzarán el debate entre un público cosmopolita. Giulia Sissa, Denis Kambouchner y Ruwen Ogien disertarán el 12 de noviembre sobre «Deseo, pasión y celos». El 10 de diciembre, Paul Audim Monique Canto-Serber y Michel Erman lanzarán un debate sobre estos temas: «Amar, mentir, traicionar». A lo largo de febrero, marzo y abril, personalidades como Julia Kristeva, André Compte-Sponville, Frédéric Worms y Raphaël Enthoven, entre otros, discutirán sobre otros temas relacionados con el amor: «El don de amar», «Ama al prójimo como a ti mismo», «¿Es posible el perdón?», «Amor narcisista y el amor del otro».

¿Es compatible la reflexión filosófica con la imagen cosmopolita de Mónaco-Monte Carlo? Carlota Casiraghi está profundamente convencida de que sí se puede : «Mónaco ha partido a su manera en la historia de las ideas de nuestra civilización. Nietzsche pasó una temporada a dos pasos de Mónaco. Es muy larga la relación de artistas y creadores que vivieron y viven en Mónaco. El «glamour» presumido está íntimamente asociado al arte de vivir. Y Mónaco, a su manera, ha defendido siempre un arte propio de vivir. El lujo, la vida cosmopolita, forman parte de la historia de la sensibilidad», dice la amazona. Y, a lo largo de la historia, los Grimaldi siempre intentaron aportar cosas de carácter cultural. «Mis antepasados fueron apasionados de grandes disciplinas artísticas. Mi abuela fue una gran actriz. Mi tío desea impulsar el mecenazgo, la ecología, la solidaridad. Funciona desde hace años un gran museo de arte contemporáneo de Mónaco. Mi madre está muy comprometida con el trabajo artístico, a través de los Ballets de Montecarlo. Apasionada de la filosofía, desde la infancia, me dije que Mónaco podía ser un buen lugar de cita filosófica, anual. Al final de los encuentros concederemos un premio al mejor libro filosófico del año. De entrada, vamos a premiar a un gran maestro y humanista, Umberto Eco».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación