Cara Delevingne declara la guerra a los paparazzi: «Ojalá que se sientan como me siento yo»

A Cara Delevingne se le agotó la paciencia y, harta de que la persigan en Londres o en Milán, ayer estalló contra los fotógrafos a través de Twitter : «Los paparazzi van a peor! No me quejo, pero me resulta triste que no pueda vivir en mi propia ciudad por esa razón». Y añadió: «También a los chicos en Milán! Sólo me tapo la cara cuando se muestran groseros conmigo, por favor no me hagan sentir como un animal de zoológico . Yo me sentía emocionada de estar en Milán, pero ahora tengo la sensación de que se va a arruinar mi viaje».

La modelo y actriz británica, presente en la ciudad italiana para su Semana de la Moda , inauguró ayer una tienda de la firma española Mango junto a la veterana Kate Moss . La convocatoria fue multitudinaria y la habitual simpatía de Cara acabó en miradas de resignación. Sus comentarios ante el acoso al que últimamente se ve sometida (y más aún desde que debutara en el cine) no dejan lugar a dudas de que ya no está cómoda con ciertos aspectos de su vida pública. Hecho que ratificó más tarde a través de la red. «Ojalá que se sientan como me siento yo. Sólo espero que alguna vez sean capaces de empatizar con otros» , escribió en Twitter. Y cuando uno de sus seguidores en las redes sociales le recordó que se gana la vida de cara al público, Delevingne dijo rotunda: «Lo sé y lo acepto. Es parte de mi trabajo, pero debería haber una línea. Nadie tendría que hacer sentir a otro así» . Acto seguido, añadió: «Bueno, que les den. Lo que tenga que ser, será. A veces no queda otra que reírse. El mundo es un lugar loco y me gustaría derramar un poco de queso fundido sobre ellos ».

Previamente, había expresado un inquietante deseo: «Algún día, cuando tenga tiempo, encontraré el lugar donde viven y acamparé en la puerta de sus casas con mis amigos armados con una cámara» . Tras cerrar su discusión por la web asegurando que así era como se sentía, deseó las buenas noches y felices sueños a los paparazzi.