Britney Spears recrea con sus hijos la portada de su disco más conocido
Con «Oops! I did it again» la princesa del pop lanzó sus canciones más conocidas. Junto Sean Preston y Jayden James recordó la carátula del álbum en Disneyland

A sus 33 años, Britney Spears ha disfrutado del éxito y ha sufrido el fracaso en una vida con tantas subidas y bajadas como una montaña rusa . Sin embargo, no olvida sus grandes momentos, y así lo ha demostrado en una divertida fotografía de Instagram junto a sus dos hijos , Sean Preston y Jayden James , de 9 y 8 años respectivamente y ambos fruto de la relación de la princesa del pop con Kevin Federline .
Para celebrar el 4 de julio, Britney se llevó a los niños a pasar el fin de semana en Disneyland y compartió varias fotografías de unos días tan divertidos, pero hubo una imagen en especial que realmente captó la atención de sus seguidores. En ella se veía a la cantante junto a los pequeños tras unas cortinas de cuentas de colores. ¿El mensaje? «Los chicos y yo con nuestra mejor pose de portada para "Oops"» . Una clara referencia a su album «Oops! I did It Again» , con el que triunfó en el año 2000 y que fue su segundo disco.
Los hijos de Britney no habían nacido entonces , pero está claro que han visto por casa la imagen de su madre en la portada del disco, tras una cortina de cuentas y con un sexy conjunto . La carátula no tardó en convertirse en un icono del pop , y todo por obra y gracia del fotógrafo Jon Ragel. En su primera semana, vendió un millon y medio de unidades y debutó en el número 1 de las listas internacionales , incluída España. Con él ganó dos premios Billboard, «World-Record Breaker of 2000» y «Album Artist of 2000».
Su primer single fue la canción que dio nombre al disco, cuyo videoclip pasó a formar parte también del imaginario pop. Britney y su mono de látex rojo triunfaron gracias a aquel video , pero la cantante nunca repetirá la experiencia. «El traje me hacía parecer super delgada , así que me pusieron pechos falsos de silicona . El primer día funcionaron a la perfección, pero a partir del segundo empezaron a caerse. ¡Era humillante!» , confesó Britney ese mismo año en Allure. «Ensayamos como 15 millones de veces el baile, y el traje me quedaba tan pegado y daba tanto calor que el sudor se escurría por las mangas» , añadió.
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