Guerra a los «selfies» en las alfombras rojas

Los organizadores del festival de Cannes consideran que es una práctica «grotesta y ridícula» mientras que los encargados de la fiesta del Metropolitan Museum aseguran que se trata de una medida de seguridad. Wimbledom prohíbe, por su parte, los «palos selfies»

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La moda de los «selfies» es imparable y parece, a priori, inofensiva. Sin embargo, para algunos organizadores de eventos se está volviendo un tanto incómoda . Ya sea por seguridad o por querer controlar las imágenes (y por ende las ventas) de aquelos actos que congregan a los famosos, se le está empezando a poner barreras a la moda de la autofoto.

En las dos grandes citas sociales de las celebrities que tendrán lugar en mayo, el festival de Cannes y la fiesta de el Metropolitan Museum, los organizadores de ambas citas quieren poner coto a esta plaga.

Según publica este viernes el New York Post, la poderosa editora Anna Wintour , la revista estadounidense Vogue (impulsora de la gala, que da el pistoletazo de salida a la exposición de moda del museo) y el Metropolitan Museum of Art han acordado evitar que los famosos asistentes tomen fotografías y vídeos con sus móviles durante la velada.

¿Negocio o seguridad?

Los organizadores en un mensaje enviado a todos los invitados previenen: «El uso de móviles para fotos y redes sociales no va a estar dentro de la gala».

El diario especula con que esta medida se deba al deseo de la revista de controlar las imágenes en el interior de la gala (lo que daría más exclusividad a un documental que están preparando), pero «sólo tiene que ver con la seguridad de los invitados y su disfrute del evento», desmienten fuentes cercanas a la organización.

En el caso de Cannes, no se trata de una prohibición tajante, sino una recomendación. Los organizadores del festival francés explicaron que el objetivo es evitar que se ralentice la llegada al Palais des Festivals con tanta autofoto, una práctica que, a juicio del director artístico del festival, Thierry Frémaux , es «extremadamente ridícula y grotesca». «Nunca sales tan feo como en un selfie ».

Pero la guerra contra los selfies se extiende también a los eventos deportivos. Por ejemplo, Wimbledon, el torneo de tenis perteneciente al Grand Slam que se celebra en el All Englang Club ha prohibido el «palo selfie», aunque no la autofoto como tal.

Para los organizadores el «selfie stick» («palo selfie», en inglés) resulta un «estorbo» que puede llegar a molestar a los espectadores y por eso han decidido vetar su uso, según recoge el medio Yahoo Tech.

El mundo del arte, también en contra

Por si fuera poco, el mundo del arte también se opone a esta modalidad .

El Palacio de Versalles y Centro Pompidou ya está prohibido también utilizarlo. Francia parece ser el país que más en contra se muestra con el uso del « selfie stick » ya que incluso en el Museo del Louvre se insta a los visitantes a guardarlos.

Pero la lista de museos que ven inconvenientes en el uso del palo selfie no acaba aquí.

El MOMA, así como elWashington DC's National Gallery of art, Getty Center en Los Ángeles, el Museo de Arte Contemporáneo y el Museo de Arte de Seattle ya lo han descartado.

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