La pintura, otra pasión de Carla Pereyra, la novia del Cholo Simeone
El gusto por las artes plásticas se remonta a la época de la argentina en Nueva York, donde trabajó en una galería de arte
A Carla Pereyra (28 años) siempre le ha gustado el arte, es una de sus grandes pasiones. Ya lo dijo el pasado mes de septiembre cuando dio su primera entrevista en exclusiva a ABC. En el bar Te Cato del madrileño barrio de Chueca, contó uno de los capítulos que menos se conocen del pasado de la modelo: la etapa que pasó en Nueva York, donde trabajó en una galería de arte durante dos años. Desde entonces, ha seguido con interés las ferias de ARCO en Madrid e incluso ha dado a conocer a Chloé Lombart, una firma de muebles de autor. Desde esta empresa, Pereyra se encarga de todos los proyectos sociales.
Discreta en todas sus apariciones públicas, Pereyra es mucho más que la novia de Diego Pablo Simeone, algo que refleja cuando habla de piezas de arte, literatura y de sus raíces familiares. Después de zanjar su carrera como modelo y de afincarse definitivamente en Madrid, la modelo comenzó a pintar sus propios cuadros el pasado mes de febrero con la ayuda del Estudio Picó, situado en Pozuelo de Alarcón. Jugando con diferentes texturas y plasmando su propio estilo, Pereyra se olvida del tiempo y da rienda suelta a su imaginación plasmando el oleaje del mar e incorporando arena a algunos cuadros.
Además de esta pasión que cultiva a diario, Pereyra también ha customizado algunos pantalones vaqueros. Todo eso, lo cuenta en las redes sociales, donde pocas veces habla de Simeone. Toda una declaración de intenciones: primero es Carla Pereyra y después la novia del Cholo Simeone.
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