Hamilton y su novia, la cantante Nicole Scherzinger, rompen tras siete años de tiras y aflojas

El piloto británico Lewis Hamilton, de 30 años, y su novia eterna, la cantante Nicole Scherzinger, una beldad de 36 años, lo han dejado, debido a que el deportista se niega a casarse, tal y como querría ella. Un dicho mexicano muy sabio reza así: «Amor de lejos, amor de pendejos». El de Lewis y Nicole no podía ser más lejano. Ella vivía en Los Ángeles, y él, en Mónaco, expatriado del fisco inglés, algo que se granjea frecuentes críticas en Reino Unido.

Nicole, salida de la cantera del programa «X Factor», y Lewis tenían precisamente estos días la oportunidad de verse más fácilmente, porque la cantante está representando en el West End londinense «Cats» , el clásico de Andrew Lloyd Webber, un éxito de taquilla que se ha visto reforzado por su presencia al frente de la alineación de gatas y gatos. Pero se conoce que esta vez el roce no ha hecho el cariño. La madre y la hermana mayor de la artista han viajado desde Hawai a Londres, para confortarla en este momento difícil. Al parecer, el piloto y la vocalista llevaban ya unos meses peleados . Tras ganar el mundial, Hamilton debía que «estamos bien así» cuando en las entrevistas televisivas se le preguntaba cuándo se casaría con Nicole, con la que llevaba siete años de noviazgo intermitente.

Su crisis más sonada había sido en 2010, pero volvieron tras dos meses. El piloto también hace sus pinitos en la música y es un «fashion victim», que busca un estilo propio con el que no siempre acierta. Es notable que cuando se veían en Inglaterra solían hacer una vida bastante relajada y poco altiva. Se les solía ver cenando en un establecimiento de «Nando’s», una cadena de comida portuguesa y criolla que ha triunfado en Reino Unido.