¿Por qué tienen nombres tan curiosos los hijos de Borja Thyssen y Blanca Cuesta?

Sin ser hijo biológico del barón Thyssen-Bornemisza , Borja Thyssen se ha criado rodeado de arte y, más concretamente, de pintura. Una disciplina que ahora también practica Blanca Cuesta, que ya organizó una exposición con sus cuadros. Quizá por esa vena artística, la pareja no ha querido que sus cuatro hijos tuvieran nombres comunes y han apostado por la creatividad. El mayor de todos, Sacha (enero de 2008), se debe a que el primer nombre del padre es Alejandro (Alejandro Borja Thyssen-Bornemisza), cuya traducción al ruso es Sacha. Lo de la elección del idioma, ya es un misterio.

El siguiente en nacer fue Eric (agosto de 2010), del que se desconoce el motivo del nombre. Pudo ser simplemente porque les gustó pero nada más se sabe. No ocurrió así con el tercer varón del matrimonio, Enzo (octubre de 2012), cuyo nombre es un homenaje (rebuscado) al nombre del barón, Heinrich. Por su parte, la pequeña Kala (noviembre de 2014) se lleva la palma de todos los hermanos. Por lo visto, el nombre tiene varios significados, desde «tiempo» a «hermosa», y también se llama así una montaña de Nepal. Lo que desconocemos es la cara que se le quedó al funcionario del registro civil.