David de Jorge «Robinfood»: «Adelgazar por hipnosis me suena a ovnis»
Socio de Martín Berasategui y chef mediático, ha perdido 130 kilos de los 267 que pesaba. Él nos cuenta cómo
No poder caminar, fatigarse al hablar, comer hasta el hartazgo, obviar un cuerpo de 267 kilos, no mencionar la obesidad... Así era la vida del cocinero David de Jorge (Fuenterrabía, 1970) hasta hace dos años y medio. El socio de Martín Berasategui, famoso gracias a su programa culinario de la ETB, «Robinfood», decidió en 2012 luchar contra su desmesurado peso para tener una vida normal.
«Yo me sentía un inválido», confiesa David ante la atenta mirada de Berasategui. Ambos están sentados en una mesa del plató donde se graba «Robinfood». Ahí, en la planta baja del restaurante del chef donostiarra que atesora siete estrellas Michelin, es donde De Jorge pasa de la alta cocina a las recetas para todos los públicos. Ahora acaba de editar «Más de 100 recetas adelgazantes pero sabrosas» (Debate), donde demuestran que es posible perder peso comiendo de todo. La mejor prueba es él mismo: ahora está en 130 kilos. Se dejó otros 130 en el camino.
Tras ponerse un balón gástrico y someterse a una reducción de estómago, David optó por cambiar sus hábitos. «Mucha gente piensa que al ser cocinero estás rodeado de tentaciones –explica–, pero precisamente gracias a ello he podido hacer un régimen con recetas sabrosas». Según De Jorge, las dietas no deben limitarse a «la pechuga de pollo. Hay que cocinar para adelgazar, aunque parezca un contrasentido».
Se lo toma todo con tanto humor, que hasta parece que no le resultó difícil perder tanto peso: «Las tentaciones sólo se van cuando uno está en la caja de pino, ahí sí que adelgazas». Sabe, sin embargo, que resistirse a ellas era necesario. «Pienso en cuando era inválido y me digo que no quiero volver a estar así», asegura.
Por ello plasmó en este libro «las recetas más difíciles que he hecho en mi vida». Porque, según De Jorge, «se puede cocinar de manera saludable, desgrasada y rica. Se puede gozar, pero también bajar kilos». Y con todo tipo de ingredientes. «No hay nada que no puedas comer, aunque no conviene la casquería a diario», bromea.
Hipnosis
Antes del balón gástrico y la reducción, De Jorge no probó otras dietas. «La Dukan no sé en qué consiste y el rollo de la hipnosis me suena a ovnis», dice entre risas. «Para adelgazar, lo que hace falta es currar», sentencia. Sin pelos en la lengua, aunque no conoce la d ieta del Doctor Perricone que sigue Doña Letizia, sí exclama: «¡La Reina está muy delgada, que nos diga lo que hace!».
Antes de abandonar el plató y subir a disfrutar de la alta cocina de Berasategui, De Jorge quiere dejar claro su mensaje: «La obesidad es algo muy serio. Es necesario ir a un médico, cambiar los hábitos de vida y abandonar los ambientes tóxicos».
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