Devilish
Un vino de maceración carbónica característico de La Rioja alavesa
Actualizado:Una de vampiros chupasangres... Mi vida está en la carretera. Entre bar y bar siempre hay asfalto. Y a veces te sientes observado e incluso perseguido. Hace unos meses fui con el amigo Leo, de La Solera situado en la calle Peñón de Conil y que vende vinazos en su bar. Leo, allí, copea vinos de un nivel que pocos sitios de esta provincia alcanzan. Me acompañó a San Fernando porque quería ver cómo es esto de la distribución de vinos. Empezamos a visitar clientes a eso de las 11 de la mañana.
Estaba lloviendo a mares, e íbamos con la intención de promocionar un vino nuevo que se llama Devilish. Muy complejo y curioso como las cosas que me gustan. Devilish está elaborado con uvas tempranillo, garnacha, mazuelo, la denostada calagraño y la blanca viura. O sea, un vino de maceración carbónica.
Le explicaba a mi amigo Leo que los vinos de maceración carbónica están elaborados con una técnica que consiste en fermentar la uva en grano, antes de estrujarla. La gente confunde estos vinos con los que tienen carbónico, y nada más lejos. Son vinos sin gas pero tienen una ventaja: la temperatura de servicio es inferior, o sea, se pueden degustar sobre los 12 grados sin perder matices en sabor y aromas, muy apropiados para las altas temperaturas de las estaciones estivales, de ahí que añadan la uva viura blanca, para aportar acidez y frescura. También es cierto que el inconveniente es que la durabilidad en botella es de menos de un año, o sea, se acorta el tiempo de consumo óptimo. Estos vinos son característicos de La Rioja Alavesa, aunque este en concreto es de La Rioja Alta.
Todo esto lo hablábamos entre bar y chaparrón. Cuando llegábamos al coche totalmente empapados debido al aguacero, nos dimos cuenta de que mi coche, rotulado, con la carretilla a la vista y cargado de cajas de vino ya no estaba en la plaza de carga y descarga donde lo dejamos. Al llegar a la comisaría y tras abonar casi cien pavos, nos explicaron que en San Fernando hace falta la tarjeta de transporte para ocupar la carga y descarga. Lloviendo como cuando Noé cargó de animales su arca.
Siempre pensé que San Fernando tiene muchas más posibilidades de recaudar haciendo feliz a la gente y ofreciendo servicios que masacrando a los trabajadores. En fin, que hartos de agua, levamos anclas y nos fuimos a Cádiz a degustar un Devilish en El Callejón, donde sabíamos que Juanjo nos iba a agasajar con unos manjares en forma de tapa. Juanjo, Leo y un menda estamos hartos de que nos chupen la sangre, por eso compartimos un Devilish.
Maridaje: Color rojo intenso con ribetes pardos debido a la oxidación de un vino de maceración carbónica en el mes que estamos. Aromático, y en boca fresco, con un punto joven y ácido. Marida bien con tapas variadas. Un vino de pote de trago largo. 6-7 € en vinoteca. Entre copa y copa vigila el coche.