Decoración
Ocho accesorios 'low cost' para tener un salón más acogedor
Lograr que un ambiente gane en calidez y confort sin subir la calefacción ni realizar grandes desembolsos es posible con estos elementos decorativos
El otoño y el invierno invitan a refugiarse en casa, protegidos del frío y de la lluvia. A las tardes de sofá y mantita, toda una tradición de fin de semana, se les suma el disfrutar de un libro, la siesta de domingo o el placer de no hacer nada. Estos ocho muebles y accesorios asequibles son todo lo que se necesita para decorar un salón 100% 'cosy'.
1
Accesorios dorados
Si hay un color, aparte del amarillo, que conecte con el sol y el calor ese es, sin duda, el dorado. Sinónimo de bienestar resulta, por tanto, perfecto para elevar tanto la moral como la calidez y la luminosidad de la habitación. Se trata de ir dando pinceladas tanto de los muebles auxiliares, como mesas de centro o auxiliares, como de accesorios, como candelabros, lámparas, jarrones, marcos… Además, el maximalismo es una de las tendencias de decoración de la temporada y la 'fiebre del oro' es su mejor compañera. Espejo Tiare (64,99 €) y jarrones Catherine (15,99 € y 69,99 €) en Kave Home.
2
Cojines
Nada como integrar cojines en la decoración del salón para calentar el ambiente y aportar un toque ‘cosy’. Los cojines y los cuadros escoceses son perfectos para darle a la sala de estar una atmósfera envolvente perfecta para la relajación y el descanso. ¿El número? Aunque las reglas de la decoración de interiores establecen que siempre uno más que el número de asientos, es decir, en un sofá de tres plazas se podrían poner cuatro, cuando se trata de confort, se puede adaptar las normas y elevar el número. Lo ideal es combinar formas, colores y tamaños, para otorgar mayor dinamismo, haciendo que combinen con el resto de la decoración o que vayan por libre. Estos pertenecen a la colección de la diseñadora Candice Gray para Westwing (desde 19,99 €).
3
Una alfombra calentita
Incorporar una alfombra a una habitación es la solución ideal para hacerla más acogedora. Debe de ser gruesa, de pelo largo, para transmitir mayor sensación de confort y calidez, y situarse delante del sofá. De manera que su mera presencia será suficiente para realzar el ambiente. Respecto al color, los tonos naturales son una buena opción en atmósferas relajantes y tranquilas. Para completar el conjunto, nada mejor que elementos en fibras naturales como mimbre o caña. En la imagen, modelo Woolable Tuba L de Lorena Canals (550 € de 170 x 240 cm), una alfombra de lana natural lavable hecha a mano.
4
Una pared en colores otoñales
Amarillo, rojo, tierra, taupe, verde… Estos colores relacionados con la naturaleza, el sol y el paisaje aportarán al salón toda su calidez. No se trata de pintar toda la estancia, que podría ser, sino de apostar por una ‘pared de acento’ (una pared que llama la atención y contrasta con el resto) que permita recrear un rincón otoñal perfecto. Es importante que el resto de tonos sea claro, para no oscurecer en exceso el espacio y que los complementos contribuyan a realzar la calidez. La luz natural es clave para que funcione. La pintura Luxens de Leroy Merlin (24,99 €/4l) es ecológica y vale también para exterior.
5
Plantas
Las plantas y las flores son la manera más sencilla de lograr un salón más confortable y apetecible. La clave está en distribuirlas bien, sobre la mesa de centro, en el aparador o en la mesita auxiliar del rincón de lectura y elegir la especie ideal. Las exóticas con hojas grandes, suculentas, con flores o, incluso, pequeños árboles frutales... La clave es agruparlas según las necesidades y optar por plantas que precisen pocos cuidados, salvo que se sea un auténtico experto. El Ficus Lyrata es una de las más Instagrameables, pero la Kentia o la Sanseviera también son una buena alternativa. Aquí se han situado en un macetero vertical con autorriego de CytiSens (149 €).
6
Velas
Capaces de crear atmósfera y proporcionar magia a cualquier rincón, algunas tienen la capacidad de proporcionar un agradable aroma al mismo tiempo. Hay diseños para todos los gustos y estilos, los candelabros también son bienvenidos, y no hace falta que se vaya la luz para encenderlas. Colócalas en un mueble, en el alféizar de la ventana o sobre la chimenea, como en esta propuesta de Cerabella (desde 6 €).
7
Cortinas gruesas
Es el momento de decir adiós a visillos y estores ligeros y dar la bienvenida a las cortinas pesadas y con caída que elevan, además de la temperatura, el estilo de la estancia. Ayudantes en el aislamiento térmico, retienen el calor interior y crean ambientes típicamente hogareños donde refugiarse del frío. Para reforzar su efecto, mejor en colores cálidos, como estas verdes de Alhambra.
8
Una manta
La unión de mantita y sofá es uno de los clásicos durante los meses de frío. El otoño y el invierno permiten saborear tardes de domingos en compañía de un buen libro junto a la chimenea o una ventana, con un té o un chocolate caliente. Un pequeño placer que no tiene precio. Este plaid inspirado en los tartanes escoceses es de La Redoute Interieurs, mide 130 x 170 cm y vale 49,99 €.