Cómo cuidar la flor de Pascua en invierno y que aguante toda la Navidad
Las flores de Pascua son muy habituales en las decoraciones navideñas. Te contamos cómo cuidarlas para que te duren todas las fiestas
La Euphorbia pulcherrima, conocida comúnmente como flor de Pascua, flor de Nochebuena o flor de Navidad , es una planta que se utiliza frecuentemente como planta de interior. Es un arbusto caducifolio del que existen más de 100 variedades y cuyas flores florecen en invierno, entre los meses de noviembre y febrero, por lo que en diciembre alcanzan su punto perfecto para decorar el hogar con aires navideños .
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Esta planta, cuyo uso se ha extendido por todo el globo, crece de forma natural en México y Guatemala por lo que hay que tener muy en cuenta las condiciones de temperatura y luz a la que debe someterse para que crezca y viva mucho tiempo.
Qué planta comprar
A día de hoy existe una gran variedad de flores de Pascua que pueden comprarse tanto en floristerias como en tiendas de decoración o supermercados. Las hay rojas, amarillas, rosas y con flores más grandes, más pequeñas, hojas lisas o con bordes recortados. ¿Cuál comprar para que dure más tiempo?
Los expertos siempre recomiendan ir a por la flor de Pascua roja tradicional , ya que el resto son híbridos cuya vida suele ser más corta. Además, dan otros consejos para que la vida de estas plantas sea más larga:
- Antes de elegir una planta, es recomendable revisar que no tiene ningún tallo roto o podrido .
- Con el truco de la moneda, podemos escoger la flor de Pascua ideal para que dure mucho tiempo. Simplemente se debe comprobar el tamaño de las florecillas maduras en el coración de las bractáreas (hojas), ya que cuantas más tenga, menos durará la planta. El tamaño de esta parte debe ser mayor que una moneda de un euro pero menor que una de dos .
Cómo cuidarla
Una vez en casa, es recomendable buscarle un sitio tranquilo en el interior (si el clima es templado también sobrevivirán en exterior) alejado de corrientes de aire . Necesita mucha luz cuando está en flor y no importa que reciba los rayos del sol de forma directa en invierno. Si el ambiente es muy seco, las hojas pueden desprenderse ya que no llevan bien el calor o la calefacción.
Lo ideal es mantener la planta entre los 19 y los 21 grados centígrados y utilizar abono orgánico líquido , que le proporcionará los nutrientes necesarios sin riesgo de que las raíces sufran.