Doña Sofía a los 76 años: mucho por vivir, tanto por hacer
La Reina Sofía celebra hoy su aniversario, mientras contempla con satisfacción el inicio del Reinado de Felipe VI. Su fundación y su familia marcan su tiempo
Hace un año, tal día como hoy, la Reina Doña Sofía respondía a ABC, a propósito de cómo llevaba su 75 aniversario, con estas palabras: «¿Que cómo lo afronto? A mí no me afecta cumplir años. Estoy encantada y, mientras tenga salud, no tengo problema. Puedo seguir haciendo lo que quiera. Uno nunca se jubila de la actitud». Hoy, Sofía de Grecia alcanza los 76 años con el mismo talante y la misma sonrisa, más allá de que ahora tenga un nuevo papel en el seno de la Familia Real.
Desde la abdicación del Rey Don Juan Carlos y la proclamación del Rey Felipe VI, el pasado 19 de junio, la Reina Sofía ha seguido con su vida familiar e institucional (sobre todo, es requerida para presidir actos culturales), aunque más alejada de los focos. En los últimos meses sus viajes privados a Grecia han sido frecuentes y siempre relacionados con visitas a sus hermanos, el Rey Constantino y la Princesa Irene. En marzo, acudió con su familia al completo (salvo el Rey Don Juan Carlos) al 50 aniversario del fallecimiento de su padre, el Rey Pablo de Grecia. En septiembre pasó unos días de descanso en el Peloponeso junto a los Reyes Constantino y Ana María, y con varios amigos muy cercanos. Visitó la vecina isla de Spetses y salió a navegar en la modesta embarcación (parecida a una menorquina) que Ana María regaló a su marido hace años. Acompañada por su hija mayor, la Infanta Elena, también celebró las bodas de oro de Constantino y Ana María.
Pocas cosas han cambiado en los últimos viajes de Sofía de Grecia al país que la vio nacer: siempre ha sido acogida con cariño por los griegos, más allá de la edad o la ideología. Sin embargo, ahora una pregunta se escucha con frecuencia: «¿Cuándo viene Sófi?». Los griegos la esperan, y más ahora, tras conocerse detalles de su vida privada. «Que venga a descansar, lo tiene bien merecido», dicen. Las muestras de respeto de la ciudadanía helena y la propia cercanía de la Reina han hecho temblar en más de una ocasión a sus escoltas. Con paciencia y buen humor, Doña Sofía saluda y se deja fotografiar en plena calle. Muchos han sido quienes la abrazaron sin pensar en el protocolo.
Hija de Reyes y educada como Princesa de Grecia, su actitud como Reina de España, y ahora en su papel de Reina Madre, ha distado mucho de la de la Reina Federica. La madre de Doña Sofía mantuvo un carácter indomable y un notable protagonismo tanto en vida de su esposo, el Rey Pablo, como después del de este, en 1964, y hasta el exilio de la Familia Real en 1967, tras el golpe de los generales. A diferencia de ella, y aunque sigue presidiendo los contados actos a los que acude, Doña Sofía dedica más tiempo a los suyos en la intimidad.
Regreso a casa
En sus desplazamientos a Grecia suele estar acompañada por la Princesa Irene, quien desde hace tiempo vive en un pequeño apartamento en el centro de la capital griega. La Reina, sin embargo, suele alojarse en el hotel Grande Bretagne . También pasa muchas horas con el Rey Constantino, quien dejó su preciosa residencia de Londres (donde vive su hijo Pablo con Marie Chantal y sus cinco hijos) y se estableció en el Peloponeso. El segundo hijo de Cosntantino, el Príncipe Nicolás, también reside en Atenas junto a su esposa, Tatiana Blatnick. El joven matrimonio ocupa un apartamento alquilado a la familia del antiguo primer ministro Yorgos Papandreu a las afueras de la capital.
En los años 90, el Estado español intentó adquirir, con el fin de convertirlo en residencia de la Embajada de España, el antiguo palacete dónde nació Doña Sofía y donde vivió su familia (antes y después de su exilio) hasta que sus padres pasaron de Príncipes Herederos a Reyes. El palacete se encuentra en el barrio residencial de Psijicó, a pocos minutos del centro de Atenas. El entonces embajador de España, Enrique Mahou, pujó en una venta por subasta para adquirir la propiedad al ayuntamiento de Psijicó. Sin embargo, un poderoso armador chipriota, Lucas Hatziyoanu (padre del fundador de EasyJet, Stelios Hatziyoanu) fue el comprador tras poner sobre la mesa muchos más millones de dracmas. Años después, durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, se intentó comprar nuevamente dicha residencia con la idea de conservar uno de los pabellones auxiliares para disposición permanente de la Reina Sofía. Pero, una vez más, la familia de armadores no quiso vender la residencia de Psijicó, aunque desde su adquisición permanezca cercada y vacía. En uno de sus viajes, Doña Sofía pasó unas horas por la que fue su casa, ahora en estado lamentable. Incluso, se asomó a la ventana del que fuera el cuarto de sus padres, la estancia donde ella vino al mundo, el 2 de noviembre de 1938, Hace hoy 76 años.