Belleza
Lipotransferencia facial o cómo rejuvenecer el rostro con infiltraciones de grasa
Cirugía Estética
Dos reputados cirujanos estéticos explican este procedimiento que mejora la flacidez y la calidad de la piel

Aún no es posible parar el reloj, pero cada vez hay más opciones para envejecer mejor, y conseguir una imagen más joven. La cirugía y la medicina estética avanzan a pasos agigantados y en el último encuentro de la Asociación Española de Cirugía Estética Plástica (AECEP), que ha reunido en Madrid a los cirujanos estéticos plásticos nacionales e internacionales de mayor renombre, la lipotransferencia de grasa o lipofilling facial se ha posicionado como una de las tendencias más novedosas para rejuvenecer el rostro.
La grasa subcutánea tiene una serie de características que la convierten en un tejido idóneo para aportar volumen a zonas que lo han perdido con la edad, como las mejillas. Pero la grasa también es rica en factores de crecimiento y en células madre, lo que significa que tiene un efecto regenerador y, por lo tanto, ayuda a mejorar una piel fotoenvejecida. La doctora Isabel Moreno, presidenta de la AECEP, explica que «infiltrar la propia grasa del paciente está demostrando que es un tratamiento de rejuvenecimiento facial muy importante. Las ventajas son diversas: es una fuente inagotable, se quita de una parte del cuerpo (normalmente abdomen o glúteo) y se puede llevar donde se quiera. Los resultados son inmediatos y para toda la vida».
¿En qué consiste la lipotransferencia facial de grasa?
Básicamente se trata de quitar grasa de una parte del cuerpo, someterla a un proceso de filtrado, y ponerla en otra zona. La lipotransferencia de grasa es una técnica de cirugía estética ambulatoria, que se realiza en el quirófano. Se suele utilizar grasa del abdomen, los glúteos o las caderas, que se extrae mediante cánulas finas. Tras someter la sangre a un proceso de centrífugado se inyecta en las zonas deseadas.
¿Dónde se puede aplicar?
El doctor Timothy Marten, diplomático de la Junta Americana de Cirugía Plástica y fundador y director de la Clínica Marten de San Francisco (California), apuesta por usar la lipotransferencia de grasa para rejuvenecer la zona del contorno de los ojos, donde es más evidente el paso del tiempo. «Tradicionalmente hemos usado la blefaroplastia, que consiste en eliminar la piel sobrante tanto en el párpado superior, como debajo del ojo. Sin embargo, en algunos pacientes, conforme pasan los años, tienen los ojos hundidos, por falta de grasa. Para ellos el lipofilling facial es la mejor alternativa».
Además de en las órbitas oculares, el doctor Timothy Marten apuesta por usar las infiltraciones de grasa en las mejillas y en el surco nasogeniano, en ambas zonas su función es aportar el volumen perdido con la edad. Por otra parte, como la grasa tiene un efecto regenerador y cicatrizante, las infiltraciones con este tejido «mejoran la calidad de la piel, es un hecho científicamente demostrado. La grasa la procesamos mecánicamente para tomar solo las células madre adultas. Es un tratamiento muy efectivo para mejorar, por ejemplo, la piel del escote envejecida por el sol y el paso del tiempo. También es muy recomendable para rejuvenecer las manos que, con el tiempo, pierden la grasa, se vuelven huesudas, y suelen presentar manchas de la edad».
¿Qué ventajas tiene la lipotransferencia de grasa?
Ambos expertos coinciden en que al tratarse de un tejido autólogo (de una misma persona), la grasa es perfectamente compatible. Además, su duración es indefinida, y una gran ventaja frente a los rellenos con ácido hialurónico, que se van reabsorbiendo con el tiempo, o el bótox, cuya duración es determinada. Los resultados se pueden ver de forma inmediata, aunque mejoran pasadas las semanas.
En ocasiones es posible que surjan pequeños hematomas o que quede una ligera inflamación, que desaparece como mucho en un mes. Aunque se realiza en el quirófano, esta técnica permite seguir con la vida habitual pasadas 24-48 horas, siguiendo las indicaciones del médico. Como en cualquier intervención, siempre hay riesgos que el paciente debe conocer antes de someterse a una lipotransferencia de grasa.
MÁS INFORMACIÓN
También es importante saber que la grasa evoluciona con el propio paciente, por eso es importante ponerse en manos de un buen profesional que valore la cantidad necesaria para mejorar el rostro y conseguir un buen rejuvenecimiento, sin caer en el exceso de relleno.