Fieles esperando de madrugada la salida del Cristo de la Expiración. La imagen, que representa a Cristo muerto en la cruz tras haber expirado, fue un regalo del cardenal Aragón a las monjas capuchinas. Es una espléndida escultura del siglo XVII, esculpida probablemente por el italiano Algardi. Su itinerario desde su actual sede canónica fue el siguiente: plaza de Santo Domingo el Antiguo, San Ildefonso, plaza de la Capuchinas, Aljibes, plaza de Santo Domingo el Real, donde desde 2002 los Caballeros Penitentes de Cristo Redentor le cantan el Miserere, cobertizo de Santo Domingo el Real, plaza de Carmelitas, Alfileritos, plaza de San Vicente, Alfonso X el Sabio, plaza Padre Juan de Mariana, San Roman, Esteban Illán, Tendillas, San Ildefonso y entrada al monasterio sede de la cofradía.