Como sobrevivir a la sequía, con cortes desde las siete de la tarde
Tal es la necesidad de agua, que en Esplugas de Francolí (Tarragona) viven rodeados de cubos,...
Tal es la necesidad de agua, que en Esplugas de Francolí (Tarragona) viven rodeados de cubos, botellas y garrafas. Porque cuando llegan las siete de la tarde se corta el grifo, trastocando la vida de todos: las cenas, las duchas, los baños. Muchos comercios, bares o restaurantes, también se sienten perjudicados. Menos mal que hay camiones que transportan hasta 26.000 litros a las localidades más afectadas. También las desalinizadoras trabajan prácticamente al máximo de su capacidad, al 90%. Aportando agua potable del mar para evitar cogerla de unos embalses que agonizan. La Generalitat ha puesto en alerta a 301 municipios, unas 700.000 personas. Un 10% de la población catalana que intenta sobrevivir a la sequía.