Profesionales a los que no les queda más remedio que trabajar a pleno sol
Caprichos del destino la calle en la que el repartidor de Paracuellos del Jarama se desvaneció sin...
Caprichos del destino la calle en la que el repartidor de Paracuellos del Jarama se desvaneció sin remedio, se llama Calle del Sol. La empresa encargada de la edición de la revista subcontrataba la distribución a una fundación que da empleo a personas con discapacidad. Son colectivos que deben revisar las condiciones de trabajo y modificar los protocolos, pero a veces no hay más remedio que salir en las franjas horarias de más calor... Como los riders, que cuando más ingresan es en los repartos de dos a cuatro. Operarios municipales, guías turísticos... son muchas las profesiones que no pueden cambiar su horario. Se enfrentan a la deshidratación, la fatiga o a quemaduras por el sol, y en el peor de los casos, a emergencias, que no siempre acaban bien.