Pedro Sánchez rearma la coalición de Gobierno para encarar el final de la legislatura
El tercer día del debate era el turno para las propuestas de los grupos dirigidas al Gobierno, a...
El tercer día del debate era el turno para las propuestas de los grupos dirigidas al Gobierno, a la bancada azul, donde no se sentaba ningún miembro del Ejecutivo para escuchar esas proposiciones. "Resulta un poco bizarro subir aquí y soltar el tema pero bueno" exclamaba el portavoz de la CUP. Las sensaciones en cuanto a contenido incluían las críticas de los aliados de Sánchez. Los de ERC avisaban de que "La banca siempre gana" y en EH Bildu que las medidas deberían ser estructurales y no coyunturales. A los socios de gobierno los anuncios de Sánchez les pillaron de sorpresa "Pero estamos satisfechos que desde Unidas Podemos hayamos convencido a nuestros socios de coalición" se congratulaba Pablo Echenique. Es momento ahora para repartirse los méritos dentro de la coalición, para la épica de Sofía Fernández Castañón, de Unidas podemos,que se reafirmaba en su acción de Gobierno insistiendo en que "No nos vamos a ir porque venimos de una genealogía de brujas que no pudieron quemar". Las confluencias siguen apretando exigiendo el fondo de diez mil millones para Sanidad y Educación. Ironizaba Aina Vidal con la esperanza de que para este fondo no tuviese que pasearse Biden por ninguna institución. Desde el ala socialista del gabinete, la ministra de Hacienda interpreta que "es lógico que el grupo minoritario del Gobierno de coalición quiera trasladar su autoría de las medidas o quiera trasladar su visibilidad". Las palabras más duras han llegado desde la oposició de Ciudadanos, con Edmundo Bal afirmando que "el Partido Socialista ayer se convirtió en Podemos" y el PP, que se queja de un paquete de medidas sin detallar. "El Señor Sánchez ha atado y bien atado su coalición con Podemos pero eso tiene poco interés para la cesta de la compra Critica" criticaba Feijoo.