La Palma sigue ardiendo con tres focos activos que afectan al Parque Nacional de La Caldera de Taburiente

Alfonso ha regresado a Puntagorda con el corazón encogido. De la casa donde vivía con su mujer y sus hijos de 6 y 8 años no queda nada. Cuando se marcharon de allí el fuego estaba muy cerca y en apenas media hora ya ardían una docena de viviendas. Más de 4.000 vecinos fueron desalojados, pero algunos se quedaron para luchar contra las llamas. La casa de Alicia se ha salvado casi de milagro, pero no pudieron hacer nada por los cultivos. Anoche se abrieron los controles y aunque todavía hay zonas de acceso restringido la mayoría ya ha podido regresar.