Viviendas sin orientación norte y con perspectiva de género, así es el nuevo decreto de habitabilidad que prepara el País Vasco
Según el borrador, las nuevas construcciones también tendrán que tener obligatoriamente una terraza
Al menos 35 metros cuadrados habitables y cuatro metros cuadrados de terraza . Son las dimensiones mínimas que tendrán que tener las nuevas viviendas que se construyan en el País Vasco cuando entre en vigor el Decreto de Condiciones Mínimas de Habitabilidad en el que ya trabajan en la Consejería de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes.
Además, según el borrador al que ha tenido acceso este periódico, deberán ser construcciones aptas «como mínimo» para que estén ocupadas por dos personas. Como novedad, se prohíben las casas en las que todas las habitaciones tengan exclusivamente orientación norte y al menos un 30% de la fachada tendrá que tener otra orientación. De esta manera se pretende garantizar un correcto «soleamiento de las viviendas»; es decir, incrementar las horas de sol diarias, lo que hará que las casas tengan más luz natural.
El borrador nace con la premisa de que «el derecho a disfrutar de una vivienda es una necesidad vital». Además, se marca como objetivo prioritario incorporar «una perspectiva de género » en el diseño de las nuevas viviendas. «Que todas las personas que vayan a habitar en las mismas lo hagan en condiciones de igualdad en relación a los espacios que componen», añade.
Esa perspectiva de género ya causó cierto revuelo en septiembre de 2009 cuando el departamento de Vivienda vasco presentó un borrador aún más preliminar que el actual. El decreto establece que en las nuevas construcciones las cocinas deberán tener al menos 7 metros cuadrados. En aquel momento se explicó que con este aumento del espacio destinado a cocinar se pretendía evitar las cocinas minúsculas donde solo cupiera una persona para fomentar que las tareas se repartieran entre dos .
Portales sin zonas oscuras
El borrador también busca que los accesos a la vivienda sean más seguros. Por eso en los nuevos proyectos los portales tendrán que tener puertas de acceso transparentes en un 75% de tal manera que se pueda visualizar el interior y el exterior. No se permitirán las zonas oscuras o los ángulos muertos y las escaleras se deberán construir sin «recovecos», dice el borrador, para que sean «seguras».
Fuentes de la Consejería de Vivienda explican a ABC que con el decreto lo que se pretende es unificar normativas de otra índole, por ejemplo municipales, que ya se están aplicando. Además, reconocen que se han tratado de incorporar cuestiones «pioneras» como la obligatoriedad de la incorporación de espacios exteriores que, recalcan, han demostrado ser elementos de habitabilidad importantes durante la pandemia.
«Con esta nueva normativa se posibilita la creación de espacios más versátiles y flexibles», reza el borrador. Advierte además de que las construcciones que no cumplan los requisitos podrían declararse inhabitables. No obstante, desde la consejería explican que esto no quiere decir que cuando un proyecto no incorpore balcones en todos los pisos se vaya a rechazar por sistema. «Aunque el objetivo es tender a ello, hay veces que no es posible», reconocen, y para estos casos se han incorporado «medidas compensatorias» .
De momento se trata sólo de un borrador todavía en elaboración al que habrá que incorporar todavía algunos informes. El Gobierno vasco empezó a trabajar sobre esta materia en 2019, pero ha sufrido un parón importante durante la pandemia. En la consejería calculan que habrá que esperar al menos dos meses más para su aprobación definitiva.