El presunto violador en serie de Guipúzcoa admite la agresión de Beasain
En el juicio, que ha empezado hoy en San Sebastián, las acusaciones piden penas que suman 24 años de cárcel
Los hechos ocurrieron el 13 de julio de 2019. El presunto estaba esperando a la víctima, hermana de uno de sus empleados, en el portal de su casa. Cuando esta se dirigía a trabajar de madrugada en una panadería de la localidad, le puso un trapo en la cara con alguna sustancia que le hizo perder el conocimiento. Una vez ya inconsciente, abusó sexualmente de ella.
«Estaba detrás, cogiéndome con su brazo por el abdomen y no podía hacer mucha cosa», ha relatado la víctima durante la primera sesión del juicio celebrado hoy en la Audiencia Provincial de Guipúzcoa. Según ha explicado a través de un circuito cerrado, se despertó varias veces durante la agresión. En una de ellas notó cómo alguien le quitaba los calcetines; la última ya no había nadie cerca y había «mucha sangre» a su alrededor. «Estaba sola en la habitación con los pantalones bajados enganchados a una pierna», ha añadido.
La mujer cogió entonces el teléfono y trató avisar a su trabajo. «Tenía la boca tan hinchada que no podía hablar», ha relatado. Con muchas dificultades consiguió contar lo ocurrido a sus compañeros que fueron los que alertaron a la Ertzaintza. «Después llegaron los médicos y me dijeron que no durmiera hasta estar en el hospital», ha contado.
Asegura que desde ese día n o ha podido volver a hacer vida normal ni salir sola a la calle . También ha tenido que renunciar a su trabajo, que le «encantaba» porque no es capaz de salir de noche de casa. «No tengo amigos, me siento mal, no me puedo integrar porque pienso que me van a atacar», ha explicado al juez.
No recuerda lo ocurrido
El presunto violador, que también ha declarado en esta primera sesión del juicio, ha reconocido los hechos pero asegura no recordar nada de lo ocurrido . Desde el banquillo ha explicado que la noche de la agresión había consumido gran cantidad de alcohol y drogas. Ese día tenía turno de noche, y segura que salió antes porque «estaba mal» y le habían ofrecido «comprar droga más barata».
«Sí, lo confieso. Qué puedo decir, no me acuerdo pero confieso» ha asegurado a preguntas de su abogado. Según ha relatado, esa noche acudió a la vivienda de la víctima con la intención de encontrarse con el hermano de ésta , un empleado suyo. Pero éste y su familia estaban de vacaciones en Rumanía y solo encontró a la víctima.
El presunto violador fue detenido en una localidad cercana cinco días después de la presunta agresión. La Ertzaintza había encontrado sus huellas y restos de semen en el lugar de los hechos. Además, estas pruebas sirvieron para señalarle también como presunto autor de otras cuatro agresiones sexuales ocurridas en la misma zona de Guipúzcoa . Por esta primera causa las acusaciones piden para él penas que en conjunto suman los 24 años de cárcel .