La incidencia acumulada en el País Vasco cae mil puntos desde el viernes
La presión hospitalaria también se ha reducido un 25%
La sexta ola comienza a remitir en el País Vasco. Según los últimos datos, actualizados este lunes, la incidencia a 14 días se sitúa en los 4.289 casos por 100.000 habitantes . Son prácticamente mil puntos menos que los registrados el pasado jueves.
Durante su comparecencia en el Parlamento vasco la consejera de Salud ha reconocido el «cambio de tendencia» , aunque ha insistido en enviar un mensaje de prudencia. Y es que el nivel de transmisión del virus sigue siendo alto en el País Vasco.
En el último día se han detectado 3.223 nuevos positivos, una cifra significativamente más baja que las registradas a diario hace una semana. Sin embargo, la caída de contagios se debe, en buena medida, a la reducción en el número de pruebas realizadas tras el último cambio de protocolo. De hecho, más del 40% de las pruebas realizadas arrojan un resultado positivo . Son los valores de positividad más altos de toda la ola y están aún lejos del umbral del 5% que recomienda la OMS para dar la ola por controlada.
Presión hospitalaria a la baja
Con la reducción en el número de test realizados, la presión hospitalaria se considera ahora el termómetro más fiable para conocer la evolución de la pandemia. Y en el caso del País Vasco, también continúa a la baja. Según el boletín de datos publicado este lunes, l os nuevos ingresos hospitalarios se han reducido un 25% .
Este lunes los hospitales vascos atendían en planta a 730 personas, 50 menos que hace una semana. Además, 112 personas contagiadas de coronavirus permanecían en alguna de las UCI vascas, son 10 enfermos menos que hace cinco días y 30 menos que los 143 pacientes críticos que se llegaron a contabilizar justo después de las Navidades, cuando las UCI alcanzaron el pico de esta ola.
Desde la Consejería de Sanidad confirman que la situación se ha «estabilizado» y que esto e stá permitiendo retomar algunas cirugías que se habían aplazado . Pese a todo, Sagardui ha insistido en que todavía habrá que esperar para dar por controlada la sexta ola. «El descenso no está siendo tan rápido como algunas fuentes preveían», ha matizado.
