El fotógrafo Kote Cabezudo niega los abusos y dice que solo hacía fotografías de contenido «sensual»
La fiscalía pide una pena de más de 120 años de cárcel y la acusación particular la eleva a más de 2.300

«Nunca han hecho nada que no supieran». Ha sido la principal línea de defensa del fotógrafo José Juan Cabezudo , conocido como Kote , en el juicio que arrancó el lunes en San Sebastián. Frente a él se sientan 16 víctimas de las que presuntamente habría abusado sexualmente cuando las citaba para realizar sesiones fotográficas.
En su declaración, que se ha retrasado un día por la incorporación de nuevas pruebas y testigos, el fotógrafo donostiarra se ha defendido comparando su trabajo con el del fotógrafo británico David Hamilton , que realizaba retratos eróticos de adolescentes y que se suicidó tras ser acusado de abusos sexuales. «No es verdad» ha repetido una y otra vez ante las acusaciones del fiscal Jorge Bermúdez.
Niega los abusos y también haber mantenido relaciones sexuales con menores. «No voy a responder si he mantenido relaciones consentidas con una persona adulta. Siendo menor no, y nunca bajo presión», ha afirmado. De la misma manera, ha negado que las modelos no supieran en qué iban a consistir las sesiones.
«Nunca han hecho nada que no supieran que iban a hacer o no quisieran», ha asegurado en su declaración. Según la versión que ha dado Cabezudo, las modelos firmaban contratos en los que a veces se detallaba que harían «un desnudo completo». Después él iba explicando durante las sesiones cómo y dónde posar. Sin embargo, ha asegurado no recordar si en algún momento mientras daba esas indicaciones tocó el cuerpo de alguna chica.
Durante las sesiones fotográficas
Su versión nada tiene que ver con la que recoge el auto del juzgado de instrucción. En él se explica que hay pruebas suficientes para concluir que compartía imágenes de las modelos desnudas en páginas pornográficas de pag o, a pesar de que, les había prometido que no se verían sus órganos sexuales. Asimismo, el juez en su relato explica que en al menos cuatro casos Cabezudo habría aprovechado las sesiones para abusar sexualmente de las modelos.
El caso más grave recogido en la instrucción es el de una adolescente de 14 años con la que pactó varias sesiones fotográficas. Según los hechos que relata el auto, Cabezudo habría subido fotos de la niña desnuda a páginas pornográficas que permanecieron visibles durante años. Por todo ello está acusado de hasta 47 delitos , incluyendo acusaciones de estafa, contra la libertad sexual y por corrupción de menores.
El fotógrafo se ha defendido explicando que las imágenes eran de contenido «sensual» y no pornográfico . «Puedo entender que haya gente a la que no les gusta, con mentalidades hacia la religión y determinadas maneras extremas de pensar», ha asegurado al tribunal. Además, ha reiterado que los contratos incluían permiso para «difundir» las fotografías por Internet.
Sin embargo, no ha conseguido dar una explicación convincente cuando le han preguntado por qué cuando las víctimas solicitaron que sus fotos desaparecieran, éstas seguían estando accesibles en la web. «No es tan fácil» , ha respondido antes de asegurar que no recordaba exactamente si había seguido mostrando las fotografías de desnudos en su página web o en sus redes sociales.
La declaración del acusado continuará en las próximas sesiones porque las partes le interrogarán uno por uno acerca de cada uno de los delitos que se le imputan. La fiscalía pide 121 años de cárcel y la acusación particular eleva su petición hasta los 2.300. Si se confirma, sería la segunda pena de prisión para Kote Cabezudo que ya fue condenado a dos años y tres meses de cárcel por obstrucción a la justicia.