El exmiembro de ETA «Yves» será el nuevo alcalde de un municipio de Álava
Iñaki López de Bergara fue condenado a 15 años de cárcel por formar parte del entramado logístico de la banda
La dimisión de César Fernández de Gamarra, cuya etapa como alcalde de Villarreal de Álava apenas se ha alargado durante cuatro meses, ha propiciado la escalada de Iñaki López de Bergara . En el pasado, el nuevo regidor del municipio vasco era conocido como «Yves» , y formaba parte del entramado logístico de ETA. La Policía francesa lo detuvo en el año 2004, y posteriormente fue condenado a 15 años de cárcel.
«Yves» permaneció entre rejas hasta 2016 por ser uno de los máximos responsables de los llamados «taldes» de reserva de ETA y por captar nuevos miembros para la banda terrorista. Aunque no se le imputan delitos de sangre, López de Bergara tenía un alto estatus en una organización de la que nunca renegó.
Consultado al respecto en 2009 por el Tribunal de Apelación de París, el radical fue conciso: «El día que los derechos del País Vasco sean respetados, el problema de la violencia se acabará por sí solo —manifestó—. Yo no condeno la lucha armada de ETA ».
Su postura respecto a los crímenes de la banda terrorista no ha supuesto un impedimento para que López de Bergara reemplace al dirigente de Bildu César Fernández de Gamarra, que ha abandonado el cargo por disputas internas. «Yves» ya gobierna en funciones el Ayuntamiento alavés, del que presumiblemente tomará plenos poderes en el próximo pleno.
Sin mecanismos legales
Una vez trascendió la noticia, el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) exigió una «urgente» reforma legal que obligue a los condenados por terrorismo «a repudiar la violencia que ha ejercido para poder acceder a cargos públicos». La presidenta de la asociación, Consuelo Ordóñez , considera «gravísimo» el nombramiento de López de Bergara, y urge a implementar un mecanismo legal que garantice unos «mínimos principios políticos y éticos» en los nombramientos.
La presidenta del colectivo ha recordado en un comunciado que Villarreal de Álava es una localidad especialmente golpeada por el terrorismo después de que en 2008 ETA colocara una furgoneta bomba con 150 kilos de explosivos frente a la casa cuartel de la Guardia Civil. A consecuencia de este atentado murió Juan Manuel Piñuel y otros agentes quedaron heridos. El monolito en recuerdo de aquel salvaje atentado fue atacado hace solo una semana por dos personas que ya fueron detenidas.
