Dos exalcaldes del PNV se sientan en el banquillo de acusados de corrupción

Se trata de Aitor Santisteban y Gabino Martínez, antiguos regidores de Alonsótegui (Vizcaya)

La Audiencia de Vizcaya ha aceptado sentar en el banquillo de acusados a dos exalcaldes del municipio vizcaíno de Alonsótegui, muy próximo a Bilbao. Se trata de dos dirigentes del PNV, Aitor Santisteban y Gabino Martínez , que según la sala podrían haber llevado a cabo diversas actuaciones corruptas durante su mandato.

En un auto fechado el 26 de mayo, la Audiencia confirma la resolución del Juzgado de Instrucción de Baracaldo de julio de 2018, que determinaba que un tribunal del jurado resolviera sobre la culpabilidad de los seis acusados.

El auto desestima los recursos que reclamaban el sobreseimiento de las imputaciones. Los dos exalcaldes, Aitor Santisteban y Gabino Martínez de Arenaza, habían argumentado en el mismo sentido sobre la falta de indicios para su acusación y lo inapropiado del procedimiento de su enjuiciamiento con jurado popular, argumentos que han sido rechazados por la Audiencia de Vizcaya.

Junto a ellos continúa el procesamiento de tres asesores legales y un arquitecto, todos ellos en relación con la gestión opaca de una sociedad municipal , Alonsotegi Eraikiz, a través de la cual el Ayuntamiento de Alonsotegi podría haber gastado alrededor de 7,3 millones de euros sin justificar su destino.

«La Sala estima que no hay norma alguna» que impida juzgar esos hechos con un jurado popular y destaca «la verosimilitud de los delitos y de su imputación provisional a los investigados», si bien constata la dificultad de concretar la participación de cada uno de los imputados en los hechos.

La Audiencia de Vizcaya ha expuesto que la sociedad Alonsotegi Eraikiz fue constituida en 2002 por acuerdo del Ayuntamiento para realizar obras públicas, proyectos de urbanización y la conservación de inmuebles.

Los investigados han tenido cargos de responsabilidad en la citada sociedad , formando parte de sus órganos de decisión y, por ello, «las acciones reprochables que se describen primero en la denuncia y luego en la querella, en la medida que se han visto indiciariamente confirmadas en la investigación, son atribuibles a dichas personas», sostiene el tribunal como remisa de partida.

Esa sociedad «prescindió de modo absoluto de los principios de publicidad y concurrencia» en las contrataciones que realizaba. El auto cita la venta de unos terrenos por valor de 4,3 millones de euros, que «fueron cobrados por la sociedad pública», sin que se conozcan el destino de dichas cantidades.

Relata también una operación urbanística de 2005 para la construcción del nuevo campo de fútbol municipal, cuyo «coste final de la obra fue un 64% superior al importe adjudicado» . En ese convenio, el Ayuntamiento abonó a Alonsotegi Eraikiz 850.000 euros, desconociéndose el destino dado a ese importe.

La Sala también apunta «numerosas irregularidades» en la operación urbanística para la urbanización de la plaza de Madinabeitia y la construcción del centro de salud.

La sociedad municipal Eraizkiz se disolvió en abril de 2011 y cedió sus activos al Ayuntamiento de Alonsotegi. En su balance de diciembre de 2010, la sociedad contabilizaba existencias por valor de 15.980.000 euros, cuando los únicos bienes que pertenecían a la sociedad pública a esa fecha lo eran por valor de 476.000 euros.

«La operación con esa contabilidad buscaba en realidad que el Ayuntamiento abonase las deudas que la mercantil mantenía con las mercantiles beneficiadas por las adjudicaciones», ha concluido la Audiencia.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación