Carlos Iturgaiz espera que Núñez Feijóo lidere una nueva etapa de «ilusión y fortaleza»
A su llegada al pleno de Vitoria ha reiterado que «un PP fuerte» será la única fórmula de plantar cara al Gobierno de Pedro Sánchez
Carlos Iturgaiz llegaba puntual a su cita este jueves en el Pleno del Parlamento de Vitoria pocas horas después de confirmar en la sede de Génova su apoyo a una c andidatura unitaria liderada por Alberto Núñez Feijóo . «Empieza una nueva etapa de ilusión y fortaleza», ha asegurado convencido de que el líder gallego es la mejor opción para que el PP vuelva a ganar elecciones .
A pesar de que Iturgaiz fue una apuesta personal de Casado tras la traumática salida de Alfonso Alonso, hoy el líder vasco se ha mostrado convencido de la necesidad de abrir una nueva etapa. Y considera que Feijóo es el candidato ideal para recomponer el partido porque «podrá exportar» al resto de España su dilatada experiencia al frente del Gobierno gallego.
«Esto se va a reflejar en las urnas», ha resumido, convencido de que el gallego presentará su candidatura, a pesar de que anoche, a las puertas de Génova Feijóo prefería esperar para confirmarlo. «Es un hombre de partido », aseguraba en declaraciones a Europa Press y por eso cree que es «coherente» que primero medite su decisión y que antes de confrimarlo lo consulte con el PP gallego. «Sabe que se tienen que hacer las cosas bien y con orden», ha resumido.
Iturgaiz fue uno de los barones presentes en la reunión que anoche se prologó durante más de cinco horas en la sede del partido, en Madrid. Ha explicado que los barones tomaron la palabra para «agradecer» a Casado todo lo que había hecho por España, pero también para convencerle de la necesidad de dar un paso a un lado. El encuentro sirvió, ha relatado, para que Pablo Casado entendiera la necesidad de que viniera otra persona «que lidere con fuerza e ilusión». Y todos coincidieron en que ese nuevo líder debía ser Alberto Núñez Feijóo a quien le pidieron que fuera «el patrón» del barco popular.
Iturgaiz no ha podido sino recordar con cierta tristeza cómo en la última semana Casado había perdido apoyo de sus bases, de su grupo parlamentario y de buena parte de su dirección . Entre militantes y simpatizantes se estaba incrementando, ha explicado, la situación de «malestar, enfado y tristeza» y para el líder de los populares vascos, llegados a ese punto, era el momento de «tomar decisiones». «Tiene que haber un PP fuerte para frenar a Sánchez y para frenar el nacionalismo obligatorio que intenta implantar el PNV», ha concluido.