Mister Toledo y su hermano gemelo lideraban la mayor red de estafadores de Amazon
El modelo, de 25 años, ha caído con otros 24 jóvenes por timar al gigante del comercio eléctrico con falsas devoluciones de productos valorados en más de medio millón de euros
Se hace llamar 'dios griego' y no tiene reparos en proclamar a los cuatro vientos cuán orgulloso que está de su físico. Mide 1,86 metros. Trabaja como consultor y es licenciado en Derecho y Administración de Empresas (o eso dice). Es aficionado al paracaidismo, el buceo, las motos y el deporte... Así como, supuestamente, a la estafa en cadena.
El actual Mister Internacional Toledo 2022, Carlos I. G., de 25 años, ha sido arrestado por, presuntamente, liderar con su hermano gemelo, Jorge, una intrincada red de estafadores que 'levantaron', al menos, medio millón de euros al gigante del comercio electrónico, Amazon.
Ninguno tenía antecedentes
Residen en el barrio de Hortaleza, desde el que movían a una banda de otras 23 personas muy jóvenes (de entre 25 y 35 años), en su mayoría españoles, salvo un par de cubanos y un venezolano. Todos carecían de antecedentes.
En enero de 2021, los servicios de seguridad de Amazon pusieron los hechos en conocimiento de la Policía Nacional. El caso lo han resuelto las comisarías de Hortaleza y Coslada-San Fernando. En los cuatro registros posteriores a las detenciones, el pasado 8 de junio, los agentes recuperaron material estafado de 100.000 euros de valor, aunque el botín real lo quintuplica. Los escondían en pisos de su barrio y del vecino de Ciudad Lineal, explican fuentes del caso.
La operación Twins ('gemelos', en inglés) ha tardado año y medio en dar sus frutos, sobre todo por lo enrevesado del 'modus operandi': la red creó medio millar de perfiles para comprar en Amazon, sobre todo, productos electrónicos como ordenadores y teléfonos móviles.
Las normas de reembolso de la compañía suelen ser bastante flexibles, al menos en una primera devolución, de ahí que se crearan cientos de cuentas falsas.
Lo que hacían era realizar los pedidos y como dirección utilizaban los puntos de recogida en establecimientos, calle o gasolineras (existe la posibilidad de usar taquillas), otra manera que tiene la compañía de realizar las entregas.
Los hermanos Carlos y Jorge llegaban incluso a hacerse pasar el uno por el otro, aprovechando su parecido físico, y manejaban 400 tarjetas de crédito monedero, para así también parecer que tan ingente cantidad de devoluciones no venían realmente del mismo lugar. En algunos casos argumentaban que el producto no había llegado y en otros, que se lo habían entregado en condiciones defectuosas.
Reventa en Wallapop
Así, devolvían en puntos autorizados por Amazon los paquetes, al principio con alguna cosa dentro sin valor, para que pesara; y, conforme su estratagema surtía efecto, ya ni siquiera con eso, sino que iban vacíos.
La empresa tiene por costumbre abonar el importe de lo comprado poco después de cursar la queja, con lo que en el momento en que llegaba a sus almacenes el dinero ya estaba en manos de la trama delictiva. El negocio perfecto.
Luego, la banda colocaba estos productos de primera calidad y originales en el portal de compra-venta de artículos de segunda mano Wallapop. Es decir, que realmente vendían material robado.
Hasta que el 8 de junio, en un dispositivo conjunto y coordinado, se desbarató a este grupo, al que acusan de estafa.