Tesoro, 28: la inmundicia y la insalubridad, las otras dueñas del «narcopiso» precintado en Malasaña
ABC accede al interior del inmuebles tras ser desalojado por la Policía Nacional este miércoles. En su interior se trapicheaba y se consumían drogas. Medio centenar de toxicómanos iban cada día al piso usurpado por la hija de la exportera. El inmueble se lo cedió la comunidad de propietarios por lástima, ya que no tenía donde ir, sin saber que sus vidas se iban a convertir en un infierno. Los altercados, gritos y apuñalamientos, unidos a los robos, tenían a los vecinos y residentes de las inmediciaciones en vilo. Tras el precinto provisional fue tapiado, a la espera de que llegue la orden de desahucio del juzgado.