El radar de tramo comienza hoy a «cazar» conductores en la A-5
Tras dos meses en pruebas, el dispositivo multará a los vehículos que rebasen los 70 kilómetros por hora
Fin al periodo de pruebas de exceso de velocidad en el paseo de Extremadura (A-5). El radar de tramo, instalado entre los puntos kilométricos 4 y 5.750, en ambos sentidos, multará desde hoy a los conductores que sobrepasen los 70 kilómetros por hora. Tras dos meses de aviso, en los que fueron detectadas hasta 27.712 superaciones , los conductores deberán aflojar el acelerador en un enclave que el mes pasado ya sufrió cambios significativos: la colocación de tres semáforos, la limitación de circular a 50 kilómetros por hora en algunos tramos y la implantación de un carril-bus exclusivo. Modificaciones, todas, englobadas dentro del plan del Ayuntamiento para convertir en vía urbana uno de los principales accesos del sur de Madrid.
Pese a que el objetivo del Gobierno que dirige Manuela Carmena es reducir la velocidad para mejorar la seguridad vial «en una zona de alta siniestralidad», así como la habitabilidad de los vecinos, lo cierto es que las aplicación de estas medidas han levantado ampollas en una zona por la que pasan cada día alrededor de 150.000 vehículos. Entre ellas, el radar de tramo, encendido el pasado 15 de febrero , pero solo como mero informador del exceso. Así, en el aviso remitido a los infractores se informaba del tipo de sanción, la cuantía de la multa y, en caso de ser preciso, los puntos del carné de conducir perdidos. Un simulacro que torna ahora en realidad.
Como ha venido informando este periódico, la A-5 «urbana» ha aumentado el tiempo de desplazamiento en las horas punta, con escenas diarias de grandes retenciones. Una situación duramente criticada por los partidos de oposición. El presidente en funciones de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán (PP), señaló ayer que el Gobierno de Ahora Madrid se caracteriza por «la prohibición, la sanción y por limitar la libertad de los madrileños». Aseguró, además, que todas y cada una de las acciones orientadas a mejorar la movilidad de la ciudad han tenido como resultado «el caos y el atasco».
Por su parte, la portavoz de Ciudadanos, Begoña Villacís, calificó el nuevo radar de tramo de «tapón», «cuello de botella» y «maltrato a los vecinos». A imagen y semejanza del PP, defendió la propuesta de su grupo de soterrar parte de la vía , con la mejora de las viviendas aledañas y la construcción de aparcamientos disuasorios y diferentes espacios verdes.
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