Un pueblo de 2.000 vecinos, masacrado a multas por un radar camuflado
De 13 a 64 euros de media por vecino, Venturada fue el municipio español que más aumentó su recaudación en multas el año pasado
En la carretera que une Venturada con Cabanillas de la Sierra , apenas 4 kilómetros separan ambos municipios. El camino, agreste y despoblado, supone un remanso de paz a espaldas de la autovía del Norte (A-1), cuya puesta en marcha dejó en barbecho a la antigua N-1. Sin embargo, pocos iban a imaginar que aquella tranquilidad brindada cuarenta años atrás, tornase hoy en pesadilla. La existencia en la zona de un radar móvil privado , colocado en pruebas por el Ayuntamiento durante un periodo de tres meses, provocó en 2016 un repunte de multas hasta límites insospechados. Tanto, que su aparición aupó a Venturada (con menos de 2.000 vecinos) hasta el tercer puesto de localidades españolas que más recaudan en multas.
Los vecinos están desesperados. Y no solo los de Venturada, pues entre los afectados, hay bastantes de otras poblaciones cercanas como Cabanillas, Bustarviejo o Navalafuente. Después de un tiempo inactivo, son varios los que señalan haber visto estos días el regreso del radar. Unos, apuntan a un Kia cee'd blanco ; otros, no están tan seguros. Pero en lo que todos coinciden es en el temor de que las multas vuelvan a dispararse como ya ocurriera meses atrás.
Un aumento, además, producido en tiempo récord. Si en 2015, Venturada ocupaba el puesto 732, con una recaudación en multas de 26.000 euros -13 euros por habitante- ; en sus presupuestos de 2016 marcaron una previsión de ingresos de 129.000 euros -63,28 euros por vecino- , hasta ocupar el tercer cajón. Para más inri, el 4,4 por ciento de los ingresos presupuestados en 2016 en el municipio procede de las sanciones (en 2015, solo el 0,22 por ciento), lo que, en este apartado, le sitúa en el sexto escalón a nivel nacional. ABC preguntó al Gobierno local sobre la ejecución de dichos presupuestos, sin, hasta la fecha, obtener respuesta.
«Me pusieron dos multas. Una me la mandaron sin foto y al exigirla, vi que el coche estaba más de 300 metros fuera del área de velocidad restringido. Reclamé y el Ayuntamiento la retiró», señala un residente, que prefiere no dar su nombre «por si acaso». «La segunda sanción fue porque iba a poco más de 60 km/h y me querían quitar dos puntos de carnet, más la parte económica. También protesté porque, evidentemente, no habían calculado el margen de error y el Ayuntamiento me la quitó sin ni siquiera contestar», prosigue, consciente de que son muchos los que prefieren acogerse al pronto pago para evitar más complicaciones.
Los afectados sostienen que, durante el año pasado, la falta de información fue una constante. «Estabas vendido, porque nadie sabía nada», apunta una mujer, al tiempo que revela el grado de angustia vivido: «El Ayuntamiento puso una señal de control de velocidad en todo el pueblo a 50 km/h. La arrancaron un par de veces y desde entonces ya no está». En este punto, la gravedad estriba en que si sales de Venturada hacia Cabanillas, no hay ningún tipo de señal que indique la velocidad máxima permitida.
Denuncian, entre otras, cosas, la condición de travesía de la carretera que une ambos pueblos. «No hay casas a menos de 50 metros, tampoco pasos de cebra, farolas ni aceras. Es un trazado con mucha visibilidad», relatan, sin entender la justificación del límite de velocidad. Son varios los vecinos que, hartos de lo que consideran «puro afán recaudatorio» , han elevado diversas quejas al Consistorio. «La gente está muy quemada. Una vez salió el pueblo a manifestarse desde la ubicación habitual del radar (a la altura de un bar-restaurante abandonado) hasta el Ayuntamiento». Ante las reiteradas reclamaciones, el Ayuntamiento se ha limitado a contestar que la carretera está considerada como travesía «porque así consta en sus archivos».
Por si fuera poco, ninguno sabe cual es su procedencia. «Siempre estaba como camuflado , con las ventanas tintadas o cubiertas con cortinas», explica un joven, cuyos suegros también sufrieron las consecuencias del radar. «Las multas no vienen de la DGT, antiguamente sí que había uno suyo, pero este desde luego que no», subraya. Desde la Policía Local de Venturada confirman que «los radares fijos se colocarán en breve», pero se desmarcan del radar privado «puesto por el Ayuntamiento durante un periodo de pruebas de tres meses ».
Desde hace semanas circulan a través de Whatsapp , varios avisos de nuevos radares. «Vamos a poner en breve otra vez el radar de Venturada en la carretera de doble dirección Cabanillas-Venturada. Dos cámaras de unos 20 metros de alcande. Radar fijo», dice uno de ellos. Otros, en cambio, son más específicos: «Aviso importante. Carretera de Venturada a Cabanillas (recta del maño) están poniendo dos radares fijos. Uno de entrada y otro de salida. Ahora sí que no nos escapamos. ¡Multa al canto! Pasar a todos los contactos».
Los nuevos tiempos, al menos, han traído «nuevas» señales . A la entrada de Venturada, viniendo desde Cabanillas, un pequeño cartel avisa de que el límite de velocidad de 50 kilómetros por hora está controlado por radar en todo el municipio. Y, al otro lado de la carretera, una señal de prohibido circular a 70 km/h se levanta a la salida de Venturada en dirección a Cabanillas.
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