A prisión un profesor depredador sexual de alumnas menores de edad
El docente, de 51 años y que fue expulsado por el director, contactó con al menos cinco menores de entre 14 y 16 años, las grabó, siguió a su lugar de vacaciones e incluso insistió en mantener relaciones. Llevaba al menos dos años actuando
La Policía Nacional ha explotado la operación Cicerón , practicada en una localidad de Madrid (que no puede ser revelada por la intimidad de las víctimas) donde un profesor habría acosado sexualmente a través de las redes sociales a al menos cinco alumnas de su centro para mantener relaciones sexuales con ellas. El individuo, de 51 años y español, ya ha ingresado en prisión . Además, guardaba cantidad de material pornográfico grabado por él y también obtenido de foros de pedófilos.
La investigación arrancó con la denuncia del director del colegio. Explicó que tenía constancia de que el sujeto mantenía relaciones inapropiadas con alumnas de entre los 14 y 16 años de edad, motivo por el que le había expulsado. Lo primero que se hizo fue identificar a una de las presuntas víctimas: reconoció que el encartado le había contactado por una red social y le había enviado un vídeo pornográfico de él mismo. Y que le había propuesto mantener relaciones sexuales en su casa. Pero es que, además, su hermana menor y también alumna del centro, había sido objeto de conversaciones de la misma índole con él. Habían intercambiado fotografías del mismo tipo y le había hecho el ofrecimiento de quedar con ella para acostarse.
El tema fue judicializado y la Policía entró a registrar la vivienda del depredador: hallaron cinco móviles, tres discos duros y una tableta con cantidad de archivos de explotación sexual infantil , algunos grabados por él mismo y recientes. Y de dos víctimas más.
Captado por unos padres
Una vez identificadas, también prestaron testimonio: hacía dos años ya que mantenían una relación virtual con él, conversaban e intercambiaban imágenes sexuales. Se conocían en la vida real, hasta el punto de que el sujeto iba regularmente a las inmediaciones de sus casas a verlas e incluso fue a la playa donde una de ellas se encontraba veraneando con su familia. De hecho, en una de las imágenes se veía al detenido merodeando su entorno. Los padres sospecharon algo y le hicieron fotos en las que se le veía en la calle frente a la habitación de la muchacha. Las engatusaba, al menos a dos de ellas, recargándoles el saldo del móvil, regalándoles un teléfono de última generación.
El análisis pormenorizado del material incautado destapó que había muchísimo material grabado por el detenido en la calle, en el transporte público e incluso a alumnas, todas menores, en la propia aula. Él mismo aparecía en actitud sexual mientras veía sus vídeos y fotos. Se hacía necesario identificar a más víctimas.
Estaba claro, como agravante, que utilizaba su condición de profesor y de relación de superioridad, también por su edad, para elegir a las alumnas con las que quería establecer contacto a través de internet.
Angustia y terror en una víctima
Además del material pornográfico propio, era un habitual de las fotos de pedófilos en la red. La quinta víct ima era otra menor que aparecía en ropa interior. Tras ser identificada, manifestó que el investigado era su profesor y que de forma reiterada y durante las horas lectivas siempre hacía referencia a temas sexuales. También reveló que, una vez finalizado el curso escolar y a través de las redes sociales, comenzaron a mantener conversaciones cuyo contenido principal era sexual y donde las solicitudes de imágenes eran constantes, provocando sus negativas el enfado del detenido , quien incluso llegó a pedir alguna prenda de vestir a la menor .
Esta situación, junto con las constantes manifestaciones realizadas por el arrestado acerca de la posibilidad de mantener relaciones sexuales de forma legal cuando la chica cumpliera 16 años, provocó un profundo sentimiento de angustia y terror a la menor cuando alcanzó esta edad, explican los investigadores.
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