Podemos estrena portavoz en la Asamblea exigiendo medidas contra la subida de alquileres
Su nombre, propuesto por unanimidad de su grupo, aún debe confirmarlo el Consejo Ciudadano Autonómico, que lo define como «solución transitoria»
Clara Serra se ha estrenado esta mañana como portavoz de Podemos en la Asamblea, tras la dimisión el lunes de Lorena Ruiz-Huerta. Lo ha hecho con una pregunta al presidente Ángel Garrido sobre las medidas a tomar para frenar la subida desorbitada de los precios de la vivienda en la región. El nombramiento de Serra, propuesta por unanimidad de sus compañeros, aún debe ser confirmado por el Consejo Ciudadano de Podemos en Madrid, que hasta que eso ocurra, lo define como una «solución transitoria».
No hay fecha para que se reuna este órgano, ya que se quiere incluir en él otros cambios en la organización del grupo. En el Consejo aún son mayoría los «pablistas», mientras que en el grupo parlamentario son los «errejonistas» quienes ahora mismo tienen más peso.
Serra ha recordado que España es «el país de la OCDE que mayor porcentaje del sueldo destina a alquileres». En Madrid, donde han subido un 25 por ciento, se invierte ya «un 44 por ciento del salario en alquiler» , ha apuntado. Mientras, denuncia que «hay 263.000 viviendas vacías que ustedes permiten, no hacen nada con los pisos turísticos y vendieron viviendas sociales a fondos buitre».
Como «ya hay más desahucios por impagos de alquiler que de hipotecas», le exige medidas al Gobierno de Madrid para cambiar las cosas y evitar la subida indiscriminada de precios de alquiler. Y recuerda que Carmena ha pedido más competencias en este sentido y las ha conseguido «en el acuerdo de presupuestos entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias». En su conclusión, ha dicho, «ustedes son un peligro que vamos a echar de Sol».
E l presidente Garrido le ha contestado que se equivocaba de Parlamento porque «la normativa intervencionista que usted nos pide es competencia del Congreso». Garrido ha matizado que «son ustedes los responsables de que suban los alquileres, porque han paralizado los desarrollos urbanísticos en la ciudad, congelando la construcción de 68.000 viviendas».
En su conclusión, «como le dijo el otro día su exportavoz, Podemos no va bien, y lo malo es que lo pagan los ciudadanos de Madrid».
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