El Pasaje de Colón reabrirá en verano como sala de estudio y exposiciones
Se invertirán 500.000 euros en remozar el espacio, diseñado por Álvaro Siza, que estaba cerrado desde 2018
El exalcalde Alberto Ruiz-Gallardón encomendó a finales de 2006 al arquitecto portugués Álvaro Siza la transformación del lúgubre pasadizo oculto bajo la plaza de Colón en un luminoso punto de información turística. Cerrado desde noviembre de 2018, este singular espacio volverá a renacer a partir de este verano como centro cultural para los vecinos de Salamanca .
Este enclave subterráneo, según indicaron a ABC fuentes municipales, ha quedado adscrito a la Junta Municipal del Distrito de Salamanca, que será quien gestione este nuevo equipamiento del barrio. En total, el Consistorio invertirá 500.000 euros en las obras, con cargo a las Inversiones Financieramente Sostenibles, que provienen del sobrante del presupuesto del año anterior.
«Será —dijo entonces Ruiz-Gallardón— la primera actuación de Álvaro Siza que se realiza en Madrid y se enmarca dentro del Plan de Revitalización del centro». «Será, en definitiva, la puerta de entrada a una de las zonas más emblemáticas del nuevo Madrid: el Eje Prado-Recoletos », anunció el exregidor popular tras la Junta de Gobierno donde anunció la primera transformación del pasaje. El subterráneo entonces también llevaba meses clausurado. Los negocios que abrieron en aquella galerías comerciales terminaron dándose por vencidos y cerraron. Los madrileños, como ocurría en otros muchos espacios similares, evitaban atravesar por este pasaje.
A través del proyecto de Siza, el espacio original (de 67 metros de longitud por 12 de anchura) se transformó en lo que el entonces el primer edil tildó de «una calle cubierta». En esta importante reconversión, el gobierno de Ruiz-Gallardón invirtió un total de 2 millones de euros . En la actualidad, el espacio cuenta con una entrada de luz natural a modo de gran lucernario abierto en la superficie de la plaza de Colón, que sirve para iluminar de forma directa una lámina de agua y un patio, situados en la zona central del pasaje. Dentro del subterráneo se despliega un vestíbulo de 300 metros cuadrados por el que se accede después a una sala de reuniones con una capacidad aproximada de 70 personas.
A este lugar se puede entrar por cuatro vías, y también en ascensor, ya que está adaptado para personas con movilidad reducida. En él se brindaba una visión general de la oferta cultural de la capital y se podían adquirir libros, catálogos, guías e incluso entradas para teatros, cines, ferias y exposiciones.
Conectado a otros centros
Con los trabajos, que se llevarán a cabo durante los primeros meses del año, se pretende comprobar y arreglar los accesos, mejorar las instalaciones lumínicas y acondicionar una nueva estancia como sala de estudio. El nuevo Pasaje de Colón dispondrá de 1.900 metros cuadrados donde se situará este espacio para la lectura.
En él también se abrirá un hueco para una sala de exposiciones , que servirá de complemento para la programación de los centros culturales cercanos como el de Buenavista o el de la Quinta de Fuente del Berro . Otra de las salas se amueblará para realizar conferencias y reuniones.
El compromiso de la Junta Municipal del Distrito de Salamanca es que todo el espacio cumpla con la normativa de accesibilidad universal y que, por tanto, no exista ningún obstáculo para las personas con movilidad reducida o con discapacidad visual o auditiva.
Noticias relacionadas