Más patrullas tarde y noche en Batán para atajar la delincuencia de los menas

Desde hace ya dos semanas, la Policía Municipal de Madrid ha reforzado el patrullaje en las inmediaciones de las estaciones de Metro de Batán, Casa de Campo, Alto de Extremadura y Lago , así como en el interior del parque madrileño ante la oleada de denuncias vecinales por robos y agresiones por parte de menores solos no acompañados (menas) . Los residentes reclaman una solución que corte de raíz los problemas de convivencia surgidos desde que el antiguo albergue juvenil Richard Schirrmann se convirtió en enero del año pasado en un recurso habitacional de emergencia para estos jóvenes, unos delitos que han ido en aumento desde que Madrid superó la etapa más dura del confinamiento y pasó a la fase 1, aún dentro del estado de alarma.

«Somos conscientes de que se han producido incidentes importantes. Ya nos hemos comunicado con la Delegación del Gobierno, ya que es competencia de la Policía Nacional y aún así, a través de la Policía Municipal, estamos tomando medidas para que los vecinos de Batán puedan descansar y pasear por las calles de su barrio sin ser amenazados o inquietados», indicó ayer el alcalde de Madrid , José Luis Martínez-Almeida , tras ser preguntado por este asunto.

Los posibles delitos asociados a los menas, como la tenencia de armas o relacionados con la seguridad ciudadana en general, son competencia de la Policía Nacional. Sin embargo, según apuntan fuentes del Área de Seguridad y Emergencias, la Policía Municipal «colabora en la prevención de dichos delitos en la medida de sus posibilidades». «En la zona de Batán, en concreto, desde hace dos semanas se ha potenciado la presencia policial y se ha ampliado el patrullaje, estableciendo un servicio consistente en acudir a esa zona varias veces al día (especialmente por las tardes y las primeras horas de la noche) y contactando asiduamente con la seguridad privada de la estación de Metro de allí», explicaron desde la concejalía que dirige Inmaculada Sanz.

Este refuerzo del patrullaje llega después de que el pasado 7 de junio, la Policía Nacional detuviese a nueve menas que apedrearon a varios vecinos en el barrio de Batán tras acudir a auxiliar a una mujer a la que habían robado. Dos personas sufrieron brechas en la cabeza, que precisaron de puntos de sutura. Además de ponerse en contacto con la Delegación del Gobierno, el regidor insistió en que el Ayuntamiento de Madrid seguirá aumentando la presencia de la Policía Municipal con el objetivo de que «no se vuelvan a repetir estos incidentes».