Ikea forma laboralmente a ocho refugiados en su tienda del Ensanche de Vallecas
Gracias a esta iniciativa, que también se ha desarrollado en Murcia, la firma sueca contratará a seis de estos trabajadores
La tienda de Ikea en el Ensanche de Vallecas ha finalizado un proyecto piloto de empleabilidad, gracias al cual cerca de una decena de personas refugiadas han recibido una experiencia formativa y laboral durante cinco semanas. La iniciativa se ha desarrollado en este punto de venta y en el de Murica, con dieciséis beneficiados.
Los participantes en el proyecto han adquirido conocimientos comunes sobre el sector de la distribución, ventas y recursos humanos , y han recibido formaciones prácticas específicas en las áreas de Atención al Cliente, Logística, Ventas y Food. La compañía ha incorporado a seis de estas personas a la plantilla de las tiendas, y realizará un seguimiento del resto de participantes para evaluar su incorporación al mercado laboral para su futura implementación en el resto de tiendas u otros agentes que puedan estar interesados.
El programa está enfocado a facilitar la empleabilidad de los refugiados y a generar oportunidades laborales, dentro del proceso de inserción laboral en el que se encuentran. La compañía tiene prevista la puesta en marcha de esta iniciativa en el resto de tiendas, de forma progresiva, a partir del próximo mes de septiembre.
Intervención de Acnur
El proyecto se ha dado a conocer este miércoles en la Conferencia sobre acogida e integración de refugiados en España, impulsada por el Alto Comisionado de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), en la que han intervenido el responsable de Sostenibilidad de Ikea Ibérica, Arturo García , y Rouba Hanna , una de las participantes en el programa.
Esta iniciativa se enmarca en la tercera línea de acción prevista en el proyecto El Poder de la Infancia con los Refugiados, la de ayudarles a Crecer. A través de las dos primeras líneas de acción de dicho proyecto, Vivir y Jugar, la compañía ha acondicionado 31 pisos y espacios de ocio infantiles en todo el país y en los Centros de Acogida al Refugiado (CAR) en Alcobendas, Sevilla, Valencia y Vallecas, gracias a las más de 3.500 horas de voluntariado prestado por más de 500 empleados de Ikea.
En este programa, centrado en la infancia y familias refugiadas, han colaborado ACNUR, CEAR, Accem y el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, con el que la compañía ha firmado recientemente un convenio para que los refugiados integrantes de los CAR puedan acceder igualmente a este período formativo.
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