El hombre precipitado desde el tejado de la estación de Atocha no era un trabajador

Dos sonoros fogonazos provocaron ayer a mediodía el caos en la estación de Atocha. Por causas que están siendo investigadas, un hombre de 30 años se encaramó al tejado del enclave , golpeándose con la catenaria y precipitándose desde una altura de siete metros a las vías 14 y 15 del AVE.

El varón caminaba sobre unas vigas cuando se produjo el grave incidente, por el que sufrió diversas quemaduras, así como un traumatismo craneoencefálico severo y una fractura abierta de fémur. Los servicios del Samur-Protección Civil tuvieron que intubarle para estabilizarle antes de conducirlo, con pronóstico muy grave, al hospital de La Paz.

Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 15.30 horas, después de que varios viajeros se percatasen de que un individuo se encontraba en la parte superior de la estación sin ningún tipo de sujeción. Fuentes de Adif confirmaron ayer a este periódico que el herido es ajeno a la plantilla de la infraestructura, por lo que todo hace indicar que accedió por su cuenta y riesgo a esta zona prohibida.

El accidente no afectó a la circulación ferroviaria, ya que las vías 14 y 15 están destinadas al aparcado de trenes. El choque con la catenaria provocó su desconexión momentánea, restablecida de forma automática, a excepción de la parte desplegada en las citadas vías donde se precipitó el individuo. Varios testigos remarcaron ayer en Twitter el desconcierto surgido tras el golpe: «Se han escuchado dos explosiones y la gente ha comenzado a correr».