El festival MadBlue convierte a Madrid en la capital de la sostenibilidad
El ciclo está ofreciendo conferencias, exposiciones, instalaciones artísticas, talleres y foros
Partiendo de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, Madrid acoge hasta el mes de junio el festival MadBlue , un encuentro internacional sobre innovación, tecnología y cultura. Con el desarrollo de diferentes conferencias, exposiciones, instalaciones artísticas, talleres, foros, etc, MadBlue es un festival que busca impulsar la economía de las regiones a través de la innovación en múltiples sectores de actividad. La finalidad es conseguir un desarrollo sostenible, ciudades inteligentes, economía circular y ecológica e inversiones en nuevas tecnologías. «Hay una oportunidad para que Madrid sea reconocida a nivel internacional como la ciudad de la sostenibilidad. Otras capitales europeas tienen su semana del diseño o de la moda, nosotros tendremos cada año nuestro festival en torno al nuevo mundo que tenemos que crear», afirma Luis Prieto, CEO y fundador de MadBlue, que añade: «Tenemos que ser capaces de atraer, retener, reunir talento en Madrid para convertir la ciudad en un punto de encuentro del pensamiento y la acción. Este es nuestro año cero».
MadBlue ha puesto de acuerdo a las tres administraciones (Estado, Comunidad y Ayuntamiento) para convertir Madrid, cada primavera, en un lugar de encuentro, debate y experimentación en torno a los retos planteados por las Naciones Unidas para conseguir un planeta más habitable. Es, además, un proyecto estratégico de recuperación de la economía a través de la inversión en soluciones y tecnologías orientadas a la sostenibilidad.
Son sedes de MadBlue 2021 La Casa Encendida, el Centro de Cultura Contemporánea Condeduque, Medialab Prado, los Teatros del Canal y el Parque del Oeste. Los ciudadanos podrán disfrutar, por toda la ciudad de Madrid, de una serie de instalaciones artísticas, acciones culturales y exposiciones que funcionarán como llamadas de emergencia al compartir un compromiso con la diversidad, la igualdad, la ecología, la innovación y con un modo de estar en el mundo económicamente más responsable y cuidadoso con el medioambiente.
Apostando por una creación y una creatividad responsables, MadBlue ha buscado artistas capaces proyectar la importancia de las buenas prácticas hacia un desarrollo sostenible; en algunos casos, desde la temática y, en otros, desde los procesos.
El Centro de Cultura Contemporánea Condeduque acoge varias instalaciones de diferentes. Patrick Hamilton (El invernadero rojo, 2020), nos habla de la economía y el cambio climático a través de un invernadero metálico cuyos cristales han sido reemplazados por metacrilato rojo, generando una sensación asfixiante desde su interior; Manolo Paz (Los mares del mundo, 2019), rinde un tributo a los océanos rescatando redes de pesca para generar una enorme obra que reproduce los colores de las aguas; Carlos Garaicoa (Línea rota de horizonte, 2021) narra la relación de la naturaleza con el espacio urbano a partir de un conjunto de árboles talados, característicos de los parques, como ejemplo de naturaleza maltratada o mutilada; Amparo Sard (Rompiendo el mar, 2021), trata las consecuencias medioambientales irreversibles con trozos de material de desecho y reciclados hasta crear un mar roto; los fragmentos tienen caras brillantes y bellas que ocultan lo residuos que el mar engulle de manera permanente, siniestra, con unas consecuencias terribles de las que desconocemos su verdadero alcance, pero que parecen conducirnos hacia la asfixia individual, hacia el suicidio colectivo; Isidro Blasco (There Is No Place Like Home, 2020) reflexiona sobre nuestra forma de mirar y contextualizar los lugares. Se trata de una acumulación de elementos que narra una experiencia personal tras una catástrofe compartida por toda la humanidad.
En paralelo, el mismo centro madrileño acoge la exposición colectiva 'El crimen perfecto'. Comisariada por David Barro, nos muestra cómo nuestro paraíso terrenal se ha convertido en un paraíso perdido, más allá de las apariencias. Esa suerte de naufragio nos concede la dimensión del mundo, una realidad que se resquebraja y con ella la utopía, como las grietas de una piscina. 'El crimen perfecto' presenta trabajos de Alberto Baraya, Gabriela Bettini, Sandra Cinto, Christian García Bello, Mona Hatoum, Susana Solano, Baltazar Torres, Françoise Vanneraud o Cinthia Marcelle. Los artistas participantes en la muestra cuestionan lo que nos rodea y nuestra percepción del mundo. Con ellos entendemos que en el crimen perfecto, el crimen es la propia perfección.
En Medialab Prado , la artista Laura González Cabrera ('Quero ver o mar', 2021) realiza una intervención pictórica sobre sus cristaleras, generando unas estructuras que evocan el movimiento rítmico del mar. Algunas de ellas contienen palabras, apenas legibles, de tres poetas exigiendo al espectador atención, tiempo y esfuerzo para descubrirlas.
En La Casa Encendida encontramos una intervención de Nuria Mora (Where is my Mind, 2021) que convierte su fachada en soporte para un enorme mensaje empleando el alfabeto náutico. Una serie de toldos situados en las ventanas proyectan otros modos de enfocar el arte urbano más allá de las habituales acciones pictóricas, actuando sobre el patrimonio histórico de una manera efímera y sostenible acorde con las preocupaciones y responsabilidad de MadBlue.