Los «errores» en el entierro de Emilia Pardo Bazán
No solo no fue enterrada en el Pazo de Meirás como había dejado escrito en su testamento, sino que durante el cambio de su lápida se estableció el 12 de marzo como la fecha de su muerte cuando era el 12 de mayo
Este miércoles se cumple el centenario de la muerte de Emilia Pardo Bazán , una autora polifacética, una de las grandes defensoras de los derechos de la mujer, considerada la mejor novelista española del XIX y, sin lugar a dudas, una de las escritoras más destacadas de nuestra historia literaria. Tal fue la tenacidaz de esta gran periodista, además de editora, poetisa, ensayista o dramaturga, que tres días antes de fallecer en su domicilio de la madrileña calle de Princesa, su mayordomo había llevado a la Redacción de ABC el que sería a la postre su último artículo.
La trayectoria de la condesa de Pardo Bazán caminó entre sus trabajos periodísticos y literarios y se erigió como un icono feminista en un momento donde era muy complicado serlo. Fallecida a los 70 años, jamás se cumplió su deseo de ser enterrada en el Pazo de Meirás , como había reflejado en su testamento, y sus restos reposan en la iglesia de la Concepción, en la calle de Goya de Madrid. Allí fue donde se podía observar un error respecto a la fecha de su muerte en su lápida –que este periódico no ha podido comprobar si continúa debido a la imposibilidad de acceder al panteón privado– y que desde numerosos sectores pedían subsanar coincidiendo con el centenario aniversario de su fallecimiento.

En su epitafio, figuraba –al menos hasta hace poco tiempo– que la fecha de su muerte había sido un 12 de marzo , cuando la realidad es que este miércoles se cumple el centenario de su defunción por ser el 12 de mayo . Hoy, numerosos actos rendirán tributo a una de las mujeres más cultas que ha dado nuestro país. En la capital, la delegada del Área de Cultura, Turismo y Deporte, Andrea Levy, homenajeará a la escritora gallega con una ofrenda floral.