La Cuesta de Moyano tendrá nueva iluminación en 2023 y un proyecto para abrir una cafetería literaria

La Cuesta de Moyano conecta el paseo del Prado con el Retiro, pero lucha desde hace años por dejar de ser un lugar de paso y resucitar su valor como un de los vértices del eje Prado-Retiro catalogado por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad . En ese camino por volver a despertar el interés de los amantes del libro antiguo, el Ayuntamiento de Madrid junto a la asociación Soy de la Cuesta llevan meses brindando a los madrileños y visitantes citas culturales cada fin de semana. Pero además de alimentar el interés por la lectura, los libreros reclaman actuaciones más mundanas, como solucionar la fuga que les ha impedido tener suministro de agua durante semanas, mejorar la iluminación o recuperar las casetas vacías. Reclamaciones que han sido escuchadas por el consistorio.

Este año, desde el distrito de Retiro, saldrán las licitaciones de las casetas números 23 y la 18. «Estamos en trámites de la caseta 7, que también podría sacarse este mismo año. Por lo tanto, hablamos 2 o 3 casetas que podrían salir en los próximos meses», ha indicado este martes el coordinador de Cultura en el Ayuntamiento de Madrid, Jorge Moreta Pérez, en la comisión del ramo..

Además, tras el verano se encargará un proyecto de iluminación de las casetas, para ejecutarlo en 2023. Y a partir de septiembre, la asociación Soy de la Cuesta se encargará de elaborar un informe sobre la historia y los valores inmateriales de la Cuesta de Moyano, para remitirlo a la Comunidad de Madrid para su posible declaración como Bien de Interés Patrimonial o como Patrimonio Inmaterial. También el año que viene se encargará un proyecto para la Cuesta de Moyano para una cafetería literaria. Asimismo, el próximo 16 de noviembre, 50 aniversario de la convención de París de Patrimonio Mundial, el consistorio presentará el libro Paseo del Prado Buen Retiro en la Cuesta de Moyano.

En cuanto a los problemas de filtraciones, según ha explicado el coordinador general del Área de Cultura, con la ayuda de la Consejería de Cultura se ha conseguido que un técnico del Canal de Isabel II localizara la rotura en la caseta 23. «El pasado jueves el fontanero del seguro de la Asociación de los Libreros de Moyano arregló dicha rotura. Para restablecer el servicio hay que concretar quién paga la factura resultante de la fuga», ha asegurado.

No obstante, tal y como ha recordado la edil de Recupera Madrid Marta Higueras, queda por resolver quién pagará la elevada factura de agua provocada por la fuga. «La rotura estaba en una caseta que llevaba vacía años. Y ahora los libreros tienen que enfrentarse a una factura de 5.000 euros de la que no son responsables», ha lamentado.