Tribunales
Bruno y la trituradora: el jurado delibera si tenía anulada la voluntad cuando mató
Es la clave del juicio, pues le conducirá a un psiquiátrico o a prisión, según se le aplique la eximente o atenuante de enfermedad mental
Quién es Noelia de Mingo
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El jurado delibera desde la tarde de ayer si el presunto descuartizador de Majadahonda, Bruno Hernández Vega, de 34 años, acusado de asesinar, triturar y deshacerse de los cadáveres de dos mujeres –su tía, en una fecha indeterminada de 2010 y su inquilina, el 1 de abril de 2015–, es culpable o no. Esa será la decisión del tribunal popular que le juzga y al que ayer, la presidenta de la Sección 30 de la Audiencia Provincial de Madrid entregó el objeto del veredicto.
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¿ Estaba lúcido cuando cometió los crímenes, descuartizó y engañó a todo aquel que se interesaba por las víctimas (durante años en el caso de su pariente Liria Hernández)? Esta es una de las veinticinco cuestiones a las que deben responder los nueve miembros del jurado, además de la clave del juicio. Ello es debido a que de la conclusión a la que lleguen –de forma lógica, razonada y en función de los hechos probados–, conducirá al procesado a un psiquiátrico penitenciario o a prisión. Eso irá en función de si consideran que la esquizofrenia paranoide que padece anuló total, parcial o levemente su voluntad. O no influyó en absoluto.
La Fiscalía pide ahora cárcel
Para el Ministerio Fiscal «no hay pruebas de ello; más bien, lo contrario». Por ello, el viernes pasado, en su escrito de calificaciones definitivas modificó la eximente incompleta de enajenación por la de atenuante. Y elevó la pena de prisión tres años ( de 26 a 29 ), al igual que la acusación particular, eliminando así el ingreso en un psiquiátrico durante 30 años.
«Llevó a cabo hechos organizados complejos y elaborados, no simples ni precipitados para ocultar los hechos», según la fiscal
La acusación particular , que coincide con la fiscal, cambió la calificación de asesinato por la de homicidio, al no haber cuerpos y no poder demostrar la alevosía. «Hay indicios y pruebas prolijas que llevan a la conclusión inequívoca de que Bruno mató a Adriana », aseveró. El letrado destacó que su comportamiento fue cuerdo y solo aludió a la hermandad ER a raíz de su arresto y de la correspondencia posterior con su pareja. «Tiene sus delirios y sabe manejarlos. La enfermedad no afecta a su memoria ni a su inteligencia».
Por su parte, la defensa pide la eximente total y alega que «no está en este mundo». Puso como ejemplo el caso de la doctora Noelia de Mingo , que asesinó a tres personas un brote psicótico el 3 de abril de 2003, un extremo que no se produjo en el procesado.
El veredicto del jurado se conocerá, previsblemente, entre hoy y mañana. Si es de culpabilidad, deberá alcanzarse por una mayoría cualificada (7 sobre 9 miembros). En caso de ser no culpable bastaría con mayoría simple (5 sobre 9).