La consejera de Medio Ambiente, Paloma Martín, con los responsables del centro de achatarramiento Autorecycling Teo Martín S. A. COMUNIDAD

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Si tiene un coche con más de 10 años, o sin distintivo medioambiental, y está pensando en achatarrarlo , sepa que ese gesto puede traducirse en 1.250 euros para su bolsillo , en forma de un bono medioambiental para utilizar en motorsharing o carsharing. Es la iniciativa de la Consejería de Medio Ambiente de Madrid, que además incluye una línea de ayudas directas por valor de 2 millones de euros, que se repartirán entre quienes quieran comprar un patinete, bici, ciclomotor o moto eléctrica.

La consejera de Medio Ambiente, Paloma Martín , ha visitado hoy Autorecycling Teo Martín S. A., uno de los cinco Centros Autorizados de Tratamiento de Vehículos de la Comunidad de Madrid, donde se achatarran estos automóviles al final de su vida útil. Solo en este centro, se achatarran entre 800 y 1.000 vehículos de todo tipo cada año. Allí, Martín ha explicado las novedades de estos bonos medioambientales y de las ayudas directas para la compra de medios de transporte alternativos eléctricos.

Por un lado, están los bonos ambientales, que se entregarán por valor de 1.250 euros para el uso del car o motosharing , a cambio de achatarrar vehículos particulares de más de 10 años de antigüedad o sin el distintivo medioambiental.

Tramitación simplificada

La tramitación para conseguir este bono es de entre 3 y 6 meses , hasta que el área verifica la información y se expide el bono con los minutos de uso de motorsharing o carsharing para el usuario, que deberá gastarlos en un plazo de dos años.

El objetivo es fomentar la movilidad cero emisiones. Y por eso, además de los bonos, también se ha destinado una cantidad de 2 millones de euros para ayudas directas a personas, o autónomos y microempresas, que adquieran patinetes, bicicletas, ciclomotores o motos eléctricas.

En estos casos, las subvenciones permitirán pagar hasta el 50 por ciento del precio de estos medios de transporte . Las ayudas tienen un límite de 150 euros para comprar patinetes eléctricos, 600 para bicicletas con sistema de asistencia al pedaleo, 700 para ciclomotores eléctricos de dos ruedas y, como novedad, también se subvencionará la adquisición de motocicletas eléctricas, hasta un máximo de 1.000 euros.

Tanto en el caso de los bonos medioambientales como en el de las ayudas directas a la adquisición de vehículos alternativos eléctricos, se ha simplificado el procedimiento para solicitarlas y se han reducido el número de documentos que hay que presentar. En algunos casos, se aceptan declaraciones responsables. Además, se han ampliado las ayudas para que también las puedan solicitar autónomos y microempresas.

Madrid «defiende un modelo de movilidad en libertad, capaz de dar respuesta a las necesidades de cada ciudadano, ambientalmente sostenible e inteligente y orientado al crecimiento económico y la generación de empleo», ha asegurado la consejera de Medio Ambiente, Paloma Martín. Este es, ha añadido, un ejemplo de colaboración público-privada: se ha firmado un convenio con la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (AEDIVE) y siete empresas del sector de la movilidad compartida, para articular estos bonos ambientales de movilidad cero emisiones.

En la Comunidad de Madrid se matriculan en torno al 45 por ciento de todos los vehículos eléctricos de España. Y respecto al achatarramiento, desde 2017 se ha observado un incremento en el número de vehículos dados de baja y achatarrados: según los datos de la Consejería de Medio Ambiente, se ha pasado de 72.000 vehículos dados de baja en 2017 a 95.000 en 2019 , un 32 por ciento más.

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