Las ayudas a mujeres víctimas de violencia se multiplica por dos: de 2.400 a 5.000 euros
También habrá una ayuda al transporte para que las 3.000 víctimas que viven fuera de la capital
Las mujeres víctimas de violencia de género que necesitan apoyo económico cuando abandonan los recursos residenciales recibirán a partir de ahora el doble de ayuda que hasta ahora: en lugar de los 2.400 euros que se les entregaba hasta la fecha, se va a pasar a 5.000. Así se decidió este lunes en el Observatorio Regional de Violencia de Género, presidido por le vicepresidente regional Pedro Rollán.
Además, el Gobierno regional va a impulsar la puesta en marcha de una ayuda al transporte para que las mujeres víctimas que no vivan en la capital y tengan que acudir a algunos de los recursos y servicios especializados que se encnetran allí puedan desplazarse de manera gratuita. Unas 3.000 mujeres víctimas de violencia de género que viven en municipios madrileños podrán beneficiarse de esta medida.
Por otro lado, los hijos de mujeres víctimas de maltrato de género, muchas veces menores, que queden huérfanos reciben una ayuda de 6.000 euros, con carácter retroactivo y compatibles con cualquier otra subvencíon, independientemente de la administración de la que proceda.
Madrid puso en marcha en 2016 la Estrategia contra la Violencia de Género, hasta 2021, con un presupuesto de 272 millones de euros . El presupuesto anual para combatir esta lacra asciende a 45 millones, y ha experimentado un incremento del 13 por ciento a lo largo de la legislatura.
Las consejeras de Políticas Sociales, Lola Moreno , y de Justicia, Yolanda Ibarrola , que han estado presentes en la reunión del Observatorio, han destacado los pasos dados por el Gobierno regional en esta materia. Moreno, «en la Comunidad de Madrid en 2017 se han realizado más de 11.300 actuaciones» enmarcadas dentro de la Estrategia madrileña contra la Violencia.
Ibarrola, por su parte, destacó el traslado y concentración de todos los juzgados de violencia sobre la mujer al nuevo núcleo penal , en la calle Albarracín, «un edificio diseñado para la protección de las víctimas, con tránsitos diferenciados para las mujeres y sus agresores» y donde gracias a un convenio firmado con el Colegio de Procuradores, «hay un procurador "de guardia" con carácter gratuito, para poder notificar al poner la denuncia y no tener que ir ellas al juzgado».
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