La Asociación de Cementerios denuncia la falta de vigilancia en La Almudena tras la profanación
Carmena niega que falte seguridad y se limita a pedir más «civismo» a la gente
La Asociación de Cementerios ha criticado duramente la «falta de seguridad» en La Almudena, después de conocerse que unos vándalos pintarrajearon las estatuas de Lola y Antonio Flores y la del hijo del político conservador José Calvo Sotelo. Sin embargo, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, manifestó ayer que el mayor camposanto de Europa tiene «suficiente» vigilancia y pidió más civismo a la ciudadanía.
La asociación manifestó su «rotunda condena y solidaridad con las familias afectadas por los actos vandálicos» (además de los conjuntos mencionados, otras nueve tumbas fueron atacadas); y tendió la mano para que el equipo de Gobierno busque «soluciones conjuntas para paliar esta lacra».
También robos
Las profanaciones, sin embargo, no son algo nuevo. Se llevan años denunciando, no solo en el cementerio de La Almudena, sino en otros más pequeños, como el de Villaverde. Incluso robos, «con el consabido perjuicio, de índole sentimental y económico».
La entidad solicitó en febrero de 2016 a la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad que se iniciaran los trámites para declarar la Almudena Bien de Interés Cultural (BIC ). Sería una manera de blindar el camposanto ante estos actos vandálicos, al verse incrementadas las penas por ellos. «Hasta el momento no se ha iniciado ninguna acción al respecto», añade la asociación.
Instan a que se incremente el control y la vigilancia privada y policial
Ante semejante panorama, instan «a los responsables municipales a que den las instrucciones para que se incremente el control y la vigilancia privada y policial en el recinto» En la actualidad, aseguran, solo existe un guardia privado para las 120 hectáreas que ocupa el cementerio, «lo que es totalmente inaceptable».
Carmena, ayer, se limitó a decir al respecto: «Debemos acostumbrarnos a que tenemos que conseguir que la sociedad sea una sociedad bien educada, lo vemos muchas veces en la ciudad: tirar papeleras, romper árboles... Tenemos que conseguir que haya educación cívica, no puede ir nadie detrás de cada persona».
La presidenta regional, Cristina Cifuentes , fue más allá: «Es algo verdaderamente rechazable y que demuestra una falta de respeto, aparte de ser un delito. Hay una ola general de vandalismo descontrolado y que hay que controlar».
