Almeida refuerza su pacto con Vox en los presupuestos post Covid

El año pasado, tan solo seis meses después del pleno de investidura, se daba por hecho que Vox daría su brazo a torcer y permitiría al bipartido de PP-Cs aprobar sus primeras cuentas en coalición en el Ayuntamiento de Madrid . No fue así. El equipo liderado por José Luis Martínez-Almeida logró la mayoría necesaria para sacar sus presupuestos en solitario gracias a un abismal error de cálculo de Más Madrid. En esta ocasión, el escenario desolador de la pandemia parece que ha allanado el camino hacia la reedición del pacto de investidura entre los tres grupos de centro-derecha. La formación que lidera Javier Ortega Smith en el Consistorio dio el viernes el visto bueno previo a la elevación al pleno del texto, que se someterá hoy a votación.

Al igual que en el pacto de investidura, Martínez-Almeida y Ortega Smith han reeditado la foto del acuerdo minutos antes de la celebración del pleno. Delante del escudo de Madrid los líderes de PP y Vox han rubricado sus compromisos, esta vez, también sin la portavoz de Cs, Begoña Villacís , que ha vuelto a evitar la foto. El regidor ha destacado la «generosidad» y «altura de miras» de Vox para garantizar las cuentas. «Hemos venido a la política para desmontar los dogmas y los chiringuitos de la izquierda», ha subrayado, por su parte, Ortega Smith.

Hasta ayer por la tarde los grupos municipales ultimaban los flecos de las enmiendas presentadas. Entre PP, Cs y Vox reinaba la «tranquilidad» . De las 451 aportaciones realizadas al borrador inicial, aprobado en la Junta de Gobierno, el bipartito respaldó 40 de las 43 propuestas registradas por el partido de Ortega Smith . Gracias a ello, en esta ocasión, sus votos positivos sí permitieron obtener el dictamen favorable de la comisión de Hacienda, un paso necesario antes de que fueran ratificadas en el Palacio de Cibeles.

Más Madrid y PSOE continúan anclados en su «no es no» y votaron en contra. Hoy han hecho lo mismo. Sus enmiendas a la totalidad del texto, por su parte, también han sido rechazadas. «Se arrimaron a la ultraderecha: tenían que elegir y eligieron, han elegido volver al pasado, volver a la ciudad de las desigualdades y nosotros también tenemos que elegir, y elegimos, pero elegimos a la sociedad civil, estar al lado de los vulnerables», ha valorado la edil socialista Enma López, que ha reprochado a Vox que quieran desmontar las «subvenciones a dedo» cuando por otro lado han aumentado algunas de ellas.

Por su parte, desde Más Madrid el edil Jorge García Castaño considera que tras esete pacto «Madrid mira al pasado y arrastra los pies, mira más a la ultraderecha que al futuro, buscando el apoyo de Vox». «Pero una es clara: si la derecha vuelve a ganar las elecciones en esta ciudad, cosa que yo dudo, la vicealcaldesa no será Begoña Villacís, o mejor dicho no será de Ciudadanos. El vicealcalde será un señor de Vox », ha advertido a Villacís.

De esta manera ha quedado confirmado que el espíritu de consenso de los Acuerdos de la Villa solo ha durado un verano . Los intentos por seducir a la izquierda al reservar el 10 por ciento del presupuesto, unos 500 millones de euros, para ejecutar los puntos aprobados por unanimidad, no han surtido efecto. « Hemos tenido abierta la puerta para negociar , ha sido un ofrecimiento sincero. Si hubiesen querido negociar las enmiendas hubieran tenido otra naturaleza», reprochó ayer a Más Madrid y PSOE la vicealcaldesa, Begoña Villacís.

Sin embargo, el diálogo «honesto» sí que ha convencido a Vox , a pesar de que no se han cumplido todas sus peticiones. En concreto, se ha eliminado la palabra «varón» del programa específico de atención a «víctimas de violencia intrafamiliar» que querían reforzar solo para hombres. Aunque, a cambio, sí se concederán ayudas directas a la Fundación Madrina para mujeres embarazadas en situación de exclusión social.