La localidad soriana de Sarnago lucha por recuperar su iglesia tras años de abandono

Cuando llegamos a un pueblo, lo primero que vemos es su iglesia. En la localidad de Sarnago, en Soria, lo que se ven son sus ruinas. El último vecino murió hace 43 años. Cuentan de él que se había resistido a abandonar el pueblo como habían hecho todos los demás. Desde entonces el tiempo pasa muy despacio en este pueblo soriano. Llegó a tener 400 habitantes. Ahora los descendientes quieren recuperar la iglesia para dar misa y para actos culturales. La última vez que escucharon misa fue en el año 1984, por eso piden la cesión de su iglesia o, más bien, lo que queda de ella. Cuando un pueblo desaparece, se pierden tres pilares fundamentales: la sociedad, la economía y también la cultura. Porque el mayor recurso de un país siempre es su gente y su gente siempre es la mejor guardiana de los recuerdos. Incluso de esos que el paso del tiempo amenaza con borrar.-Redacción-