Un paso más para localizar la mítica piedra del Apóstol Santiago
arqueología
Padrón autoriza las excavaciones para tratar de encontrar la roca en la que la tradición jacobea asegura que se depositó el cuerpo del discípulo de Jesús tras viajar desde Tierra Santa
Bajo una explanada de cemento se oculta en A Barca (Padrón) el meandro del río Sar en el que comenzó una de los movimientos culturales más importantes de la Edad Media. A ese punto la tradición jacobea señala que llegaron Atanasio y Teodoro desde Palestina en el siglo I con los restos del Apóstol Santiago. El Códice Calixtino relata que, tras desembarcar, lo depositaron en una piedra que milagrosamente se reblandeció adoptando la forma del discípulo de Jesús. Durante siglos el lugar fue frecuentado por peregrinos, pero después cayó en el olvido hasta que a finales de los años 50 se rellenó. Desde 2018, el arqueólogo Andrés Bonilla busca los restos de ese Portus Apostoli. Tras realizar dos prospecciones esperanzadoras con georradar, ahora podrá realizar una primera excavación para encontrar la mítica piedra.
El Ayuntamiento de Padrón informó esta mañana que ha autorizado los trabajos arqueológicos, que cuentan también con el visto bueno de Patrimonio de la Xunta. «Ha sido una carrera de fondo de cuatro años de duración. Nada fue fácil, pero ahora ya trabajamos sobre resultados. Con la cata arqueológica que se va a realizar esperamos confirmar el vestigio arqueológico señalado por el georradar«, indica Ángel Rey Castro, presidente de la Asociación Cultural Villa Petroni e impulsor de la investigación.
En 2018, el radar de sondeo terrestre localizó imágenes de una estructura semejante a unas escaleras del siglo XV o XVI que daban acceso al meandro y estaban señaladas en la documentación histórica como el punto en el que se amarró la barca con los restos del Apóstol a su llegada a Galicia desde Tierra Santa. Pero la piedra que supuestamente tomó la forma del Apóstol no apareció entonces. En 2021, se realizaron nuevas prospecciones ampliando la zona de estudio. Tras analizar las imágenes apareció un «indicio de aproximadamente 1,9 m2 de superficie y morfología rectangular que podría asociarse a una piedra enterrada a 1,5 m de profundidad depositada en el antiguo lecho del río, cerca de la estructura escalonada localizada en la primera prospección», informan los promotores de la investigación.
La excavación prevista tendrá un plazo de tres días y comenzará este mes de noviembre en una fecha aún por concretar. El equipo de Andrés Bonilla realizará una cata arqueológica «que consiste en llegar al elemento que el georradar identificó como la peña». Una vez que se alcance, se documentará (con fotos, dibujos, medidas) y se cubrirá con una malla geo-textil. Después se volverá a cerrar el terreno a la espera de una intervención mayor, que debe realizar la administración pública para una excavación completa y puesta en valor del patrimonio que pueda aparecer. La franja de terreno donde se actuará es de propiedad municipal y corresponde aproximadamente con la mitad inferior del meandro seco. Está asfaltada y se destina a aparcamiento público de vehículos.
De encontrarse la piedra en esta primera prospección, «tendríamos a la vista un elemento patrimonial físico, tangible, del mismo mito de la Traslatio, sobre el cual se asienta toda la tradición jacobea y que constituye por si mismo el lugar de origen de esa misma tradición y del Camino de Santiago medieval«, asegura Ángel Rey Castro. »La confirmación del hallazgo con este sondeo valorativo situaría a Padrón de forma definitiva como el Primus Portus Apostoli«, sostiene el presidente de la Asociación Cultural Villa Petroni.
En la Edad Media se contaba que el Apóstol había abandonado Tierra Santa tras la muerte de Jesús y se trasladó a Hispania para difundir la palabra de Dios. Entre los lugares en los que predicó, el relato sitúa al entorno de la actual Compostela. La ciudad más importante de la zona por aquel entones era Iria Flavia, próxima al punto donde se realizarán las excavaciones. Tras regresar a Jerusalén y ser decapitado por Herodes, sus discípulos deciden traerlo de vuelta a Galicia. El Códice cuenta que desembarca en Padrón, donde antes de los rellenos efectuados en la ría de Arousa se podía llegar en barco. En una entrevista con ABC, el arqueólogo Andrés Bonilla explicaba que «no hay duda de que la piedra existió, otra cosa es que se produjera el milagro». Entre los siglos XV y XVIII, los peregrinos que llegaban a la Catedral de Santiago tenían por costumbre caminar después hasta Padrón para contemplarla. Algunos dejaron escrito el relato de su periplo y sus textos inspiraron también algunas ilustraciones.