Detenido un hombre en Coristanco (La Coruña) como presunto autor de un incendio
Las llamas comenzaron a solo 300 metros de un núcleo de viviendas
El supuesto autor es un hombre «que tenía problemas de convivencia con los demás», informa la Guardia Civil
La Guardia Civil de Arteixo ha detenido a un vecino de Coristanco (La Coruña) como presunto autor de un incendio forestal, ocurrido el 2 de agosto en Vilaverde-Cereo. Se trata del primer arresto del verano de personas sospechosas de ser incendiarias en Galicia. Aunque, por suerte, las llamas que supuestamente habría iniciado este hombre no alcanzaron gran tamaño, sí fue necesaria la intervención de una cuadrilla, una motobomba y un agente para la extinción del foco, que se encontraba a menos de 300 metros de un núcleo de viviendas, recoge Ep.
Los efectivos procedieron a la inspección ocular de la zona una vez extinguido el fuego. En el transcurso de la investigación, tras el estudio de los vestigios recogidos y el análisis de la información recabada, la Guardia Civil logró conocer la identidad del autor de los hechos, que resultó ser un vecino de la zona, «que tenía problemas de convivencia con los demás«. Las diligencias instruidas por estos hechos han sido remitidas al Decanato de los Juzgados de Carballo.
Los hechos coinciden con el inicio de esta ola de incendios que asolan Galicia, la mayoría provocados «por la mano del hombre», como había dicho el conselleiro de Medio Rural, José González. Son varios los incendios que, durante las últimas semanas, son inequívocamente provocados. El caso más relevante y claro en este sentido es el del incendio de Verín, en Orense: los focos comenzaron a pocos metros de las casas, para que así los servicios de emergencias se concentraran en «proteger a la población». Mientras tanto, el incendiario se movía en coche hacia el monte, iniciando hasta otra decena de focos a lo largo de la carretera, tratando de dificultar al máximo las tareas de extinción. Tras una semana de lucha incansable, este fuego quedó ya extinguido. «Los vamos a coger, caerá sobre ellos todo el peso de la ley y recaerá sobre su patrimonio los costes de extinción, que están siendo cuantiosísimos«, advertía el martes González. Por lo de pronto, ya han cogido a uno.
